Agencias
Hasta el cierre de esta edición, informes preliminares indican que 39 soldados permanecen retenidos en la plaza principal del pueblo. En tanto que otros 27 elementos castrenses se encuentran en la misma condición, pero en las inmediaciones de la mina del lugar, que es administrada por la empresa Ternium de México.
De esta forma la también llamada guardia comunitaria exige la liberación de sus compañeros detenidos.
Entre los miembros del grupo de autodefensa que fueron capturados la mañana de ayer está Agustín Villanueva Ramírez, líder y fundador de ese grupo.
Las detenciones se efectuaron la mañana de ayer durante un operativo del Ejército, la Marina y cuerpos policiacos del Gobierno del Estado.
En la irrupción policiaca militar en Aquila, en el que participó el subprocurador regional de Morelia y encargado del despacho de la PGJE, Marco Vinicio Aguilera Garibay, los uniformados decomisaron fusiles AR-15, rifles AK-47, pistolas 9 milímetros, armas .38 súper, fusiles .12 milímetros y escopetas a los guardias comunitarios.
En tanto, miembros de la Iniciativa Privada del estado reclamaron al presidente Enrique Peña Nieto que ponga atención a lo que ocurre en Michoacán, pues el clima de violencia e inseguridad que priva desde hace tiempo puede derivar en un estallido social.
Sobre el operativo de “despistolización”, se informó que participaron más de 2 mil efectivos de la Policía Ministerial, Grupo de Operaciones Especiales, Ejército Mexicano y Marina, mismos que arribaron al municipio justo cuando caía una fuerte tormenta que ayudó como factor sorpresa para que los guardias comunitarios no opusieran resistencia.
La Policía Comunitaria en Aquila, Michoacán, surgió luego de la creación de otros grupos en municipios como Buenavista, Tepalcatepec y Chinicuila, ante la situación de inseguridad en la entidad.
Los detenidos fueron trasladados al puerto de Lázaro Cárdenas. Las guardias comunitarias anunciaron un frente común para liberar a sus compañeros y ya han solicitado el apoyo de otros grupos similares de la región para impedir su traslado a algún penal.
Hasta el cierre de la edición, prevalecía un ambiente de tensión en la zona porque varios de los autodefensas dijeron estar dispuestos a todo para defender a sus compañeros.
Ante la crisis que se vive, representantes de diversos sectores productivos de la sociedad civil de Michoacán exigieron al presidente Enrique Peña Nieto ponga atención a lo que ocurre en la entidad, pues el clima de violencia e inseguridad que priva desde hace tiempo puede derivar en un estallido social.
En conferencia de prensa más de una veintena de productores, académicos, representantes de indígenas y de organizaciones civiles, así como de empresarios se dijeron desesperados por la situación de violencia y la desaceleración económica que ésta ha generado en prácticamente todas las actividades de la entidad.
Advirtieron que no será con el envío de tropas militares o de elementos policiacos como se controlará la situación, sino con mayores recursos para restablecer la planta productiva y generar oportunidad de desarrollo para la población.
Tito Fernández Torres, presidente del movimiento Paz y Dignidad, organismo que agrupa a medio centenar de asociaciones civiles, señaló que la población de Michoacán se encuentra “a dos fuegos”, pues por un lado están los delincuentes, y por el otro otros delincuentes vestidos de policías. “Es una situación insostenible”, señaló.
En la conferencia, productores de aguacate revelaron que pagan a la delincuencia organizada un “derecho de piso” de mil pesos por hectárea para que no les sea robado su producto en el momento de la comercialización. (Reforma/Apro/El Universal)
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