miércoles, 11 de septiembre de 2013

CONOZCA A LA MONJA GRADUADA EN HARVARD QUE DEFIENDE LA REVOLUCIÓN BOLIVARIANA EN CATALUÑA


Forcades explica que “estuve tres veces más –en Venezuela- y es lo que yo creí bueno. Eso en Europa nos hace falta urgentemente, esa conciencia de que el sujeto político es una persona de la calle”.


Hoy 11 de septiembre se realiza en Cataluña una gran jornada de protesta a favor de la independencia, que incluye en otras cosas una cadena humana que conecte todo el país; y el abrazo a La Caixa, el banco catalán, en la cual participará Teresa Forcades, una monja protagonista de esta lucha.

“Mi nombre es Teresa Forcades, yo soy monja aquí en el monasterio de San Benet de Montserrat, y además de formación soy médica, especialista en medicina interna y doctora en salud pública. Yo creo que ser monja y el activismo político no está para nada reñido, pero hay otra política, con mayúscula, que quiere decir ese preocuparse por el bien común, preocuparse no desde lo abstracto sino en este caso desde una iniciativa concreta”, afirma Forcades al presentarse.

Ella es una activista de la lucha por la independencia y referente dentro de esta lucha del movimiento “Procés Constituent” (Proceso Constituyente), que recorre toda Cataluña impulsando asambleas para discutir qué independencia se quiere: “Hay un movimiento creciente por la independencia de Cataluña, un movimiento que nos parece, a quienes hemos impulsado este manifiesto, que debe de incluir la decisión no solo sobre si queremos ser un Estado propio o no sino qué tipo de Estado queremos ser, porque tenemos Estados independientes en Europa como por ejemplo Grecia, en una situación deplorable”.

Forcades describe su búsqueda política como revolucionaria: “Entiendo la revolución como un cambio radical, y creo que en el momento en que vivimos el cambio no puede ser cosmético, no puede ser un cambio dentro del sistema sino que tiene que ser un constatar de las reglas de juego que ahora rigen la convivencia política y también la interacción social y económica, dentro de esas reglas del juego es imposible hacer prevalecer las necesidades de la mayoría”.

Y, explica que en su proceso de acercamiento a esa política que enarbola, la experiencia de la Revolución Bolivariana la ha influenciado mucho: “Mi experiencia única ha sido visitar Venezuela: “La visité en 2007 por primera vez y mi impacto inmediato fue lo que llamo la subjetividad política: personas que tenían un perfil marginal (…) pero que hablaban desde una posición de convencimiento de que su opinión valía para algo”.

Forcades agrega que “estuve tres veces más y es lo que yo creí bueno. Eso en Europa nos hace falta urgentemente, esa conciencia de que el sujeto político es una persona de la calle”.

Así, Teresa Forcades, referente de la lucha por la independencia de Cataluña, lleva en su horizonte político la Revolución Bolivariana, algo que se puede ver en dos aspectos centrales. En primer lugar, la iniciativa de un proceso constituyente, algo que ocurrió en nuestro país con la llegada de Hugo Chávez –y también ocurrió en Bolivia y en Ecuador- y su visión anti-capitalista: “¿Cuál es el factor ideológico que hace que hoy en día esa injusticia no tenga respuesta social?, yo creo que es que no hemos creído hasta ahora, y está empezando a cambiar, es que no había alternativa al sistema capitalista”

4 comentarios:

  1. Y todavía lleva hábito? Hay cosas que no simplemente no se pueden entender, teniendo en cuenta como la Iglesia Católica es el epítome mismo del Fascismo.

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  3. Esta valiente mujer, aparte de ser monja es médico estudiada, ella no habla en nombre de la iglesia católica y está más que claro. Que se le quiere juzgar o satanizar, por los horrores cometidos por otros en nombre de la iglesia católica y de Dios, es injusto. Hay que verla como una guerrera que terminó de abrir los ojos cuando vino a Venezuela y presenció el proceso revolucionario que vivimos con la llegada de nuestro Gigante Comandante Chávez. Referencia esta, que le hizo ver mejor el horizonte de la independencia de Cataluña!!. Muchos usan la sotana para seguir sometiendo a los pueblos con sus miserias humanas, ella echa a un lado su hábito para ser científica médica y revolucionaria como Cristo (aunque a alguien le pueda parecer contradictorio). Heler Godoy, Repúlica Bolivariana de Venezuela.

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  4. La Iglesia Católica (y otras sectas) es fascismo. El dios hebreo Yavé no porque no existe pero si existiera también sería fascismo puro (sólo lee el antiguo testamento y flipa!) Pero en cualquier caso la Iglesia Católica surgida del Imperio Absolutista Romano y del Patriarcado Totalitario Hebreo es desde el primer momento un engendro fascista horripilante.

    Ya en un primer momento, tras el golpe de estado de los Costantinianos, se dedicaron a perseguir a sangre y fuego todas las demás sectas (excepto a los judíos rabínicos) y a someter a las mujeres a un rol secundario, destruyendo la ciencia e incluso el arte (que decae tremendamente con estos fanáticos a cargo). Estas políticas de intolerancia prosiguieron por muchos siglos y América las sufrió de forma particularmente brutal, como todos sabemos.

    No es que "alguna gente" haga esto o lo otro, es que la Iglesia en sí es un engendro autoritario vertical en el que los creyentes no tienen ni voz ni voto. Por no hablar de que es un timo como el tocomocho: te venden algo (dios, vida eterna) que no existe y nunca obtendrás. Deberían estar todos en la cárcel (o campo de reeducación) por fascistas y estafadores.

    No estoy hablando de casos no tan aislados como la violación sistemática de niños, sino que me refiero a la tortura sistemática que ejercen sobre ellos en sus escuelas (normalmente pagadas por el estado) engañándoles con ideas irracionales como "dios" o, peor aún, "el pecado". Eso sí que es violar a niños en masa, violarles el cerebro, destrozarles el alma.

    Y sé de qué hablo en primera persona, porque yo también soy una víctima del adoctrinamiento sectario cristiano (jesuita, para ser preciso pero son todos lo mismo). Y nunca, ni mis padres, ni la Iglesia, ni nadie, me pagará un indemnización por el daño causado. Un daño terrible de confusión y miedo con el que no vine a este planeta.

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