En Panamá, agentes de la policía nacional dispararon contra el coche que conducía una familia indostana, residente en el país. Este ataque acabó con la vida de un niño de 2 años y su prima de 15. Este hecho se suma otros perpetrados contra civiles en incidentes donde se acusa a la policía de negligencia y uso excesivo de la fuerza letal.
Voceros de la comunidad indostana residente en el país piden una revisión integral de las políticas de seguridad, para evitar que accidentes, equivocaciones, y que los abusos de los agentes gubernamentales continúen sucediendo.
Tan solo en febrero pasado, dos jóvenes pescadores fueron acribillados por la policía tras confundirlos con narcotraficantes. Muertes como estas han quedado sin castigo debido a los nueve indultos con los que el presidente panameño, Ricardo Martinelli, ha beneficiado a 120 policías.
Organizaciones de la sociedad civil exigen el fin de la política de indultos, que califican de inconstitucionales; también piden la derogación de una ley aprobada en 2010, que prohíbe la detención de agentes involucrados en crímenes realizados en el ejercicio de sus funciones.
De esta manera, la comunidad indostana de Panamá salió a honrar a dos niños muertos a manos de la policía. En tanto, el pueblo panameño aumenta su rechazo a la ley denominada de impunidad policial.
Hispan Tv
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