Los denominados indignados paraguayos convocaron a una manifestación frente a la Secretaría de Transporte como primera protesta por la decisión de aumentar el precio del pasaje en los ómnibus urbanos.
La molestia de la ciudadanía se expresará tras la decisión del gobierno de eliminar el subsidio al transporte urbano y el anuncio de los empresarios de subir el 20 por ciento en el costo de la transportación a pesar de las deficiencias notables del servicio.
Lo más importante del problema es que el cese del pago del subsidio a partir del último día de este año implicará automáticamente esta primera parte del incremento, pues en corto tiempo el boleto registrará otro 20 por ciento más en el precio.
De esta forma, el nuevo año significará para la ciudadanía comenzar a pagar 40 por ciento de aumento y viajar en los destartalados ómnibus costará entre 60 y 70 centavos de dólar.
Los pobladores se disponen a salir a las calles el próximo viernes para concentrarse frente a la entidad estatal que rige el transporte público expresando asi su inconformidad con lo sucedido.
La convocatoria pide que las personas lleven cacerolas, carteles y todos los objetivos adecuados para mostrar su censura a la actitud de los propietarios privados de las líneas de transporte y también a la falta de una solución al tema por parte del Ejecutivo.
Los indignados ya realizaron anteriormente grandes manifestaciones contra la corrupción frente al Parlamento y habían advertido volverían a las calles si se confirmaba lo que consideran un atropello a la economía de la población.
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