sábado, 1 de agosto de 2015

Dos menores palestinos mueren al ser disparados por fuerzas israelíes en protestas tras el asesinato del bebé

Se trata de Mohamad Hamid al Masri y Laith al Jaldi, ambos de 17 años
El primero de ellos falleció en Gaza; el segundo, en un puesto de control militar cercano a Ramala
El viernes un niño de 18 meses perdió la vida después de que su casa fuera incendiada por colonos israelíes en la zona de Cisjordania ocupada
El ejército israelí se enfrenta enfrenta a varios palestinos durante los disturbios desatados en la localidad cisjordana de Hebrón ayer tras tras el asesinato de un bebé quemado vivo y las heridas graves a sus padres y hermano en un ataque de supuestos extremistas colonos en la localidad de Duma. EFE
El ejército israelí se enfrenta enfrenta a varios palestinos durante los disturbios desatados en la localidad cisjordana de Hebrón ayer tras tras el asesinato de un bebé quemado vivo y las heridas graves a sus padres y hermano en un ataque de supuestos extremistas colonos en la localidad de Duma. EFE

Palestina y el mundo conocían el viernes  la muerte de un bebé de año y medio en la localidad de Duma tras incendiarse su casa en un supuesto ataque perpetrado por colonos israelíes en la zona de Cisjordania ocupada. Tras el trágico final, los habitantes de los territorios palestinos se echaron a la calle para mostrar su rechazo a este asesinato, donde se produjeron choques que se han saldado con más muerte.
En este caso de dos menores de edad. Dos varones de 17 años que han perdido la vida a manos de las fuerzas de seguridad israelíes. Uno de ellos, Mohamad Hamid al Masri, murió el viernes en Gaza tras recibir un disparo después de aproximarse presuntamente a la frontera que separa la Franja de Israel, según fuentes médicas citadas por la Agencia Maan.
La segunda víctima es Laith al Jaldi, fallecido el impacto de disparos de las fuerzas israelíes durante unos choques registrados en las inmediaciones de un puesto de control militar cercano a Ramala, en Cisjordania, según fuentes de los servicios médicos.
El joven, residente en el campo de refugiados de Jalazone, recibió un disparo en el pecho en el puesto de Atara. A pesar de que fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas, los médicos no pudieron salvarle la vida debido a que había perdido mucha sangre, informa la agencia Maan. Con él, ya son 20 los palestinos que han perdido la vida a manos de las fuerzas israelíes en lo que va de año.

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