Una abuela iraquí dice ser una de las personas más temidas por Estado Islámico y ha recibido amenazas de muerte personales del líder del grupo.
Wahida Mohamed Al-Jumaily, de 39 años, afirma haber decapitado y cocinado las cabezas de varios combatientes de Estado Islámico para vengar la muerte de su familia.
ISIS mató a su segundo marido a principios de este año y previamente había matado a su padre y a tres hermanos.
Más conocida como Um Hanadi, la mujer dirige una milicia de 70 soldados en lucha contra Estado Islámico en el pueblo recién liberado de Shirqat, que se encuentra 50 millas al sur del bastión yihadista de Mosul, en Irak.
“Luché contra ellos, les he decapitado, he cocinado sus cabezas y he quemado sus cuerpos”, declaró a CNN.
La líder de la milicia, que se describe a sí misma como un “ama de casa”, ha publicado una foto en Facebook en la que parece mostrar que lleva una cabeza cortada, y otra que muestra dos cabezas cortadas en una olla.
Según la mujer, ha recibido amenazas de muerte personales “de la máxima dirección de ISIS, incluyendo al propio Abu Bakr al-Baghdadi”.
“Seis veces trataron de asesinarme. Llevo metralla en la cabeza y las piernas, tengo las costillas rotas, pero todo eso no me impide luchar”.
General de Jamaa Anad, comandante de las fuerzas terrestres iraquíes en la provincia de Salahuddin, declaró a CNN que le habían proporcionado a su grupo vehículos y armas.
“Ella perdió a sus hermanos y maridos como mártires”, dijo. “Así que por venganza formó su propia fuerza de combate”
Los combatientes de Estado Islámico tienen miedo de morir a manos de mujeres, según sostienen las combatientes kurdas, porque creen que ello significa que no irán al cielo.
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