Al menos cien palestinos resultaron heridos este lunes en Cisjordania, ocho por munición real, en protestas en apoyo a la huelga de hambre de presos israelíes y contra Israel, en coincidencia con la visita a la región del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Hasta las 16.00 GMT los equipos de auxilio habían atendido “a cien heridos, ocho por lesiones de munición real, veinte por heridos por balas de metal recubiertas de caucho, 64 heridos por inhalación de gas y ocho por lesiones como resultado de quemaduras o caída”, informó la Media Luna Roja a la prensa.
Este servicio de emergencias, equivalente a la Cruz Roja y que opera en los territorios palestinos, habilitó un hospital de campaña en la zona de Qalandia, donde está el puesto de control que separa Ramala de Jerusalén, al que se aproximó una marcha con cientos de personas que partió esta mañana desde el centro de la ciudad.
También se registraron heridos en manifestaciones violentas en Hebrón, Jericó, Qalquilia, Abu Dis, cerca de Belén, y Deir Sharaf, en Nablus, entre otras localidades de Cisjordania.
Las protestas han sido convocadas por el Comité Nacional de Apoyo a los Presos palestinos en huelga de hambre y por las facciones políticas como parte de los actos de solidaridad que se vienen repitiendo desde que el 17 de abril cientos de reos en cárceles israelíes iniciaran un ayuno indefinido.
Las tiendas, colegios e instituciones están hoy cerrados en solidaridad con los reclusos.
Durante la jordana de protesta se gritaron eslóganes contra la política estadounidense y condenas a la ocupación israelí, y se vieron pancartas con la cara de Trump cubierta con la huella de un zapato, un gesto muy insultante en el mundo árabe.
“La huelga ha sido un mensaje para Trump que expresa la insatisfacción de la gente hacia la política estadounidense que apoya a Israel”, declaró a EFE Basam Salehi, secretario del Partido del Pueblo Palestino.
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