A fines de mayo se estrenó “Piratas del Caribe: La venganza de Salazar”, quinta entrega de la famosa saga perteneciente a Disney.
Todo era números positivos hasta que Kaya Scodelario, una de las actrices del rodaje, dio una entrevista e hizo una declaración que prendió las alarmas del mundo animalista.
Y es que afirmó a The Sun que “el integrante más memorable del elenco fue el mono, porque vomitaba todo el tiempo”.
El animal, para quienes no lo recuerden, es aquel que se posa en el hombro del personaje del Capitán Barbossa, y al parecer, como contó Scodelario, “tenía un estómago muy pequeño y cuando estábamos rodando en el barco vomitaba en medio de las escenas, era muy gracioso”.
Estas palabras provocaron la molestia y reacción de Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA). En un comunicado dirigido a Disney, emplazaron a la empresa de entretención y al equipo de producción del rodaje. También calificaron de “inaceptable” lo sucedido. “No hay forma humana de obligar a un animal a actuar en una película”, transmitieron, según El Universal.
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