Pese a la represión de estos días pasados, el movimiento de los Indignados ha mantenido durante la mañana de este jueves su movilización en la céntrica plaza de la Bolsa de París.
Quincemero
El movimiento de los Indignados ha mantenido durante la mañana de este jueves su movilización en la céntrica plaza de la Bolsa de París (Francia), después de una noche en que la policía francesa detuvo a 11 de ellos y se llevó a otros 63 para ser identificados. El miércoles otras cientos de personas fueron arrestadas."Los indignados se han sentado en el suelo frente al edificio justo al lado de la Bolsa. Rápidamente, la policía ha llegado al lugar y los ha rodeado. Los indignados han empezado la asamblea sin tener en cuenta el gran dispositivo policial a su alrededor", explican en un comunicado.
Realizaban una asamblea pública frente a la Bolsa. El primer arresto fue justificado por los agentes diciendo que se trataba de "una manifestación ilegal". Los 'indignados' esistieron pacificamente pidiendo la puesta en libertad del compañero. osteriormente, los policías detuvieron a todas las personas que habían rodeado. Los primeros grupos fueron llevados en tres furgonetas, 30 personas se quedaron sentadas en la plaza mientras las fuerzas del orden preparaban un autobús.
Todas las personas que estaban dentro del cerco han sido detenidas, "en ocasiones de forma violenta", según sus portavoces que hablan de, al menos, un herido.
Los indignados han sido arrestados por una brigada que se ocupa de la seguridad del territorio francés. El pasado lunes un centenar de participantes de la Marcha a Bruselas fueron retenidos en el Bulevard Saint Germain del centro de París por "manifestación ilegal".
La Prefectura de Policía de París explicó que las 63 personas a las que la policía se llevó para ser identificadas estaban participando en una asamblea general organizada en la céntrica plaza de la Bolsa, donde protagonizaron una sentada.
El portavoz aseguró que la intervención policial se llevó a cabo sin violencia y que no hubo heridos.
Los participantes en la "Marcha Bruselas" habían previsto concentrarse ayer delante de la catedral Notre Dame de París, pero ante la fuerte presencia policial, decidieron trasladar su protesta a la plaza de la Bolsa.
Un centenar de personas repitieron hoy otra sentada en esa plaza para celebrar una asamblea en la que condenaron la "brutalidad policial" y confirmaron que tienen intención de llegar a Bruselas el próximo 8 de octubre para presentar sus reivindicaciones al Parlamento Europeo.
Los concentrados bailaron un sirtaki en solidaridad con Grecia y recordaron que el suyo es un movimiento que "no tiene fronteras".
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