A pesar de los pesares, y aunque el nuevo presidente de Estados Unidos sea controvertido y represente un “cambio hacia lo desconocido”, como escuché asegurar hace pocas horas a una reconocida analista latinoamericana, muchos coincidimos con Donald Trump en que la cadena norteamericana CNN es una mentirosa.
En un reciente encuentro con varios medios de comunicación de su país, a los que denunció “face to face”, Trump manifestó además, dirigiéndose directamente al director de la CNN Jeff Zucker, que su “gran” medio de prensa engaña, y “se ha constituido sobre una red de mentirosos”.
Y no hay duda alguna que el electo mandatario norteamericano tiene toda la razón en su afirmación sobre la referida televisora, bautizada en muchos países de la Patria Grande como la “Cadena Más Mentirosa” (CMM).
Durante muchos años, la “CMM” no solo ha sido portavoz y anunciante de todas las guerras emprendidas por Washington y el Pentágono, sino también alentadora de golpes de Estado en América Latina, y difamadora por excelencia de los gobiernos y procesos populares en nuestra región.
No existe un ejecutivo progresista en Latinoamérica que no haya sido blanco de los ataques constantes de ese medio de comunicación estadounidense, “especialista” en difamar sin escrúpulo alguno, y siempre escudado en las manipuladas “libertades de expresión y de prensa.”
Tampoco han escapado de sus continuas agresiones líderes y dignatarios de la Patria Grande como Fidel Castro, Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Raúl Castro, Nicolás Maduro, Cristina Fernández, Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega y Dilma Rousseff, entre otros muchos.
Sin embargo, la “CMM” defendió a dictadores sangrientos de la talla de Augusto Pinochet, en Chile, y a connotados terroristas como Luis Posada Carriles, el Bin Laden latinoamericano, y quien todavía se pasea libremente por Miami, Florida, a pesar sus innumerables crímenes, entre ellos la voladura en Barbados de un avión de la línea aérea Cubana de Aviación, en 1976, que costó la vida a 73 personas inocentes.
Corresponsales y conductores de la CNN entrevistaron a Pinochet y a Posada Carriles para presentarlos como “luchadores contra el comunismo”, y claro está pretender lavar la imagen de dos de los más flagrantes violadores de los Derechos Humanos en la Patria Grande.
Es cierto también que la misma televisora ha entrevistado a personalidades progresistas de nuestra región, pero con el propósito contrario: conseguir desacreditarlos ante la opinión pública internacional.
Trump tiene sus propias razones para acusar a la CNN de mentirosa y denunciar a la gran prensa de Estados Unidos, que prácticamente en su totalidad apostó por la derrotada candidata demócrata Hillary Clinton en las elecciones del pasado 8 de noviembre.
Una gran interrogante que merece hasta una investigación a fondo es por qué Trump fue atacado por la mayoría de los medios de su país, en beneficio de la Clinton, hecho que los convirtió en grandes perdedores similar a la aspirante demócrata.
Lo que sí es incuestionable es que muchos en Nuestra América concordamos con quien será el futuro inquilino de la Casa Blanca en que la CNN tiene adjudicado el titulo de la Cadena Más Mentirosa.
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