El presidente Alan García tendrá que asumir su responsabilidad respecto a las seis personas que murieron durante el conflicto en Puno, en el marco de las protestas contra la actividad minera, sostuvo Luis Zambrano, sacerdote de la Parroquia Pueblo de Dios de Juliaca
El religioso desestimó el alegato presidencial de que reservistas del ejército obligaron a pobladores de la provincia de Azángaro a tomar el aeropuerto de Juliaca, ante lo cual tuvo que actuar la policía, que disparó con un saldo de seis muertos.
“Lo que dice el presidente es una excusa para no asumir su responsabilidad y creo que con el tiempo las tendrá que asumir porque son muertos. Creo que aquí ha sucedido como sucedió en Bagua”, expresó.
“En cuanto a lo que dice de los campesinos, por supuesto en una huelga donde hay masas no siempre todos pueden ser controlados. Nosotros hemos visto que ha habido desmanes, pero de ahí a decir que los campesinos son manipulados ya me parece que es una exageración y es buscar nuevamente una excusa de la responsabilidad que él [García] y los del Gobierno en Lima tienen” apuntó.
“Todos tenemos que revisar y sacar las conclusiones de lo que ha sucedido”, manifestó. “Pero que no se excuse el Gobierno y el presidente [Alan] García, que no lance frases que son de desprecio a los pueblos aimaras, quechuas y a sus creencias, cultura y religión”, enfatizó. El religioso reveló que los familiares de las seis víctimas que perecieron tras la toma del Aeropuerto Internacional Inca Manco Cápac han conformado un “comité de víctimas”, que se reunirá este sábado 2 de julio en Puno para coordinar algunas acciones internas. Demanda de quechuas y aimaras no es de ahora
Explicó que el reclamo de los pueblos quechuas y aimaras, tanto en el norte como en el sur, no son de ahora, sino de hace varios años, sin que a la fecha se haya tenido alguna respuesta de parte de las autoridades. En ese sentido, rechazó cualquier tipo de discriminación a las demandas de la milenaria sabiduría comunitaria.
“Ha habido muchos trámites, recursos, protestas pacíficas, incluso han venido comisiones que se llamaban de alto nivel que [más bien] a mí me parecían comisiones de bajo nivel que en gran parte no solucionaban nada. Entonces, esto ha sido un escalonamiento de diversos problemas que ya son antiguos”, declaró. “[…] El agua que tomamos ya está malograda, el Lago Titicaca ya está infectado este reclamo es tremendamente justo y yo vengo siguiendo hace años a las personas que reclaman y la verdad veo que no hay una actitud positiva de parte del gobierno que ya se va no entre aplausos, sino entre huelgas”, concluyó.
En la ciudad centroandina de Ayacucho estudiantes de la universidad estatal lugareña fueron reprimidos por la policía cuando protestaban por demandas académicas.
También la semana pasada murieron tres manifestantes durante protestas estudiantiles en la también centroandina ciudad de Huancavelica, durante disturbios en los que fue parcialmente incendiado el local del gobierno regional.
El presidente electo, Ollanta Humala, ha pedido al gobierno saliente que solucione los conflictos sociales y no le deje una situación explosiva cuando el líder nacionalista asuma funciones, el 28 de julio.
Humala descartó también que los conflictos tengan motivaciones meramente políticas y considera que expresan problemas sociales concretos que deben atenderse con el diálogo y la prevención.
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