domingo, 26 de febrero de 2012

REPUBLICA DOMINICANA - LOS PROFETAS DEL ANEXIONISMO Y LA ISLA SAONA


de  Johnny Guerrero

A raíz de las pretensiones del gobierno dominicano de entregar la Isla Saona al Comando Sur del ejército de EEUU, para la construcción de una base naval, atrajo mi atención en una librería de la ciudad un libro intitulado “Anexionismo y Resistencia. Relaciones dominico-norteamericanas en tiempos de Grant, Báez y Luperón”, de la autoría del señor Diomedes Núñez Polanco, quien, acorde a la nota biográfica publicada en el mismo, fue “asistente del profesor Juan Bosch…; durante varios años ha dirigido el periódico Vanguardia del Pueblo, vocero del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y coordinado la Comisión de Publicaciones de esa entidad política”.
El libro en cuestión inicia con dos citas del senador norteamericano Olivier P. Morton, de Indiana, quien defendía la anexión de Republica Dominicana a Estados Unidos en 1870: “… La anexión de Santo Domingo llegara.  Profetizo aquí esta noche que llegara.  Quizás no llegue en los tiempos del General Grant, ni los míos, pero veo que está destinada a producirse, y con ella, también la de Cuba y la de Puerto Rico… Santo Domingo es la llave de las Antillas.  Contiene el mejor puerto del mundo.  Domina el gran Canal de la Mona, desde el Atlántico hasta el Mar Caribe”.  “… Santo Domingo es el pedazo de tierra más rico del mundo… Santo Domingo es el más grande escaparate natural de las producciones más selectas del mundo y Santo Domingo solo, país que si lo conseguimos solamente nos costara muy poco, vale para nosotros, desde el punto de vista comercial, social y de cualquier otro modo, cincuenta Alaskas…”
En la introducción de su libro, el señor Núñez Polanco explica que “… se dificultan las explicaciones sobre acontecimientos como la anexión a España en 1861 o el proyecto de anexión a los Estados Unidos.  Pero si profundizamos en el decurso de nuestro proceso histórico notaremos que en ello juega un papel clave el fracaso del tipo de sociedad que los nativos han propuesto y tratado de instaurar desde antes y después de sus independencias nacionales.  Hemos tratado de encauzar la organización social y política de nuestros países a partir de los modelos norteamericanos y europeo.  Ahí ha estado una de las bases principales de nuestra turbulenta historia”.  Continua diciendo que “Los sistemas políticos y económicos que tratan de imponerse en determinados países sin que respondan a su grado de desarrollo social, se convierten en una especie  de flor ornamental; sin savia, sin clorofila y sin raíces”.

Contrario a lo que señala el autor, fueron “los nativos”, quienes con sus protestas y luchas, impidieron que Buenaventura Báez materializara sus planes anexionistas.
El presidente Leonel Fernández, que según el autor, “se ha especializado en política exterior, con notoria atención en la estadounidense…”, tratando de imponer un sistema político y económico que no responde a nuestro “grado de desarrollo social”, fue quien expreso que iba a convertir a Santo Domingo en un “Nueva York chiquito”, y de hecho ha construido túneles, pasos a desnivel y metro, que en realidad son una “flor ornamental; sin savia, sin clorofila y sin raíces”.
Al terminar la introducción, el señor Núñez Polanco, pretendiendo dar a entender que es neutral ante el tema de la anexión, argumenta, que su libro es una “investigación histórica”, cuyos objetivos no son “de interés coyuntural” ni “de agitación política”.    Sin embargo, se pronuncia a favor de que los gobiernos de Estados Unidos y de Republica Dominicana, “independientemente de las querellas del pasado”, deben “mantener abiertos los canales de intereses recíprocos y ampliar los planes de engrandecimiento en una época de cambios, en que se modifican conceptos e ideas tras la adecuación a un mundo marcado por grandes crisis, pero con fuerzas suficientes para consolidarse y avanzar”.
Y los resultados están ahí.  El gobierno de Leonel Fernández, “abriendo los canales de interés reciproco” pretende entregar al gobierno norteamericano nuestra isla Saona, lo cual traerá muchas protestas y resistencia, que al final impedirán la materialización de ese ignominioso acto del gobierno en contra de la soberanía nacional y del pueblo dominicano.

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