En vísperas del comienzo de la Conferencia Internacional Ginebra II, Damasco ha vuelto a ser escenario este jueves de una marcha multitudinaria a favor del presidente Bashar Al Assad.
A esta manifestación, una de las mayores concentraciones en apoyo al Gobierno sirio, han acudido distintos grupos religiosos, políticos, sociales y tribales.
Los participantes han asegurado que “el destino de Siria debe ser determinado por el pueblo y dentro del país, y no en la Conferencia Internacional Ginebra II”.
En este sentido, los grupos tribales sirios han hecho hincapié en que los opositores que residen fuera del país árabe no son sus representantes, dado que han traicionado sus valores.
El próximo 22 de enero dará comienzo la conferencia de paz sobre Siria, Ginebra II, en la ciudad suiza de Montreux, y después continuará en Ginebra; su objetivo es hallar una salida pacífica a la crisis que vive el país árabe.
Asimismo, los congregantes han destacado que la crisis que atraviesa Siria, desde hace tres años, es un complot urdido por EE.UU. y el régimen de Israel, que es ejecutado por los grupos terroristas apoyados por algunos países regionales.
Por último, los jeques tribales y la élite de la comunidad siria han pedido a Bashar Al Assad que participe en las próximas elecciones presidenciales.
Damasco tiene planeado celebrar elecciones presidenciales dos meses antes de que expire el mandato de Al Assad, en agosto de 2014.
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