La desproporcional preparación de facilidades hospitalarias para el tratamiento de casos de Ébola, en Puerto Rico, ordenada por EE.UU generó una amplia controversia respecto al real uso militar que se planea darle a dichas instalaciones.
El Hospital de Veteranos de la capital, San Juan, es una instalación federal que sirve a veteranos de guerra o soldados del Ejército.
Es a esta institución a quién EE.UU., ordenó implementar un masivo plan de contingencia y preparación de una magnitud sin precedentes con el fin de alistarse para el tratamiento del virus del Ébola aunque las probabilidades de su llegada al país son escasas.
Dado lo extremo de la medida y que tampoco fue replicada en instalaciones de EE.UU en su propio territorio, diversas fuentes de inteligencia revelaron las verdaderas intenciones de esta iniciativa: El centro sería usado como campo de tratamiento y cuarentena para aquellos soldados estadounidenses que actualmente ayudan a combatir el virus en África y que eventualmente pudieran contagiarse.
El canal iraní en lengua española, HispanTV, consultó al respecto a una de las máximas autoridades de Puerto Rico en Washington quién no admitió dicho plan. Ante la contundencia de los hechos, Pedro J. Pierluisi Urrutia, dejó entrever que otras facilidades militares si llevarían adelante la atención a soldados estadounidenses provenientes de África.
La ciudadanía, por su parte, dice desconocer cualquier estrategia del Gobierno para enfrentar el virus del Ébola en el país y descree seriamente de la existencia de un plan de preparación para contener una potencial crisis de la mortal enfermedad.
Aunque es remota la posibilidad de la llegada del mortal virus, el parlamento instó a prepararse. A pesar de los reiterados intentos, el Hospital de Veteranos se negó a dar comentarios a estas acusaciones las que continuarán siendo investigadas por organismos de la sociedad civil.
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