El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió hoy que el armamento suministrado por Estados Unidos a los rebeldes sirios puede acabar en manos del Estado Islámico (EI), objetivo de la actual campaña rusa de bombardeos aéreos en Siria.
“Ahora informan que con los aviones del Ejército Libre Sirio (ELS) suministrarán armamento y munición. ¿Dónde está ese ELS?. ¿No caerá eso de nuevo, como ocurrió al instruir a sus tropas, en manos del EI?. ¿Dónde está la garantía?”, dijo Putin en una rueda de prensa en Moscú.
El jefe del Kremlin recordó que la propia administración estadounidense reconoció que la estrategia de apoyo a las milicias rebeldes contrarias al gobierno sirio de Bashar al Assad “ha fracasado”.
“Y ahora de nuevo lanzan armamento y munición. ¿A quién?. Y esta no es una pregunta retórica”, señaló, según informa la agencia de noticias EFE.
Putin insistió en que con su intervención aérea, Rusia no busca el liderazgo en Siria, donde “sólo puede haber un líder: el pueblo sirio”.
“Buscamos hacer nuestra contribución a la lucha contra el terrorismo, que es peligroso tanto para EEUU como para Rusia, para los países europeos y para todo el mundo, sin exagerar ni un ápice”, apuntó.
Aunque no quiso salir al paso de las recientes críticas del presidente de EEUU, Barack Obama, recordó que Rusia actúa en estricta consonancia con el derecho internacional, mientras la coalición internacional no tiene ningún mandato de la ONU ni la autorización de Damasco.
La referencia fue clara: Rusia decidió intervenir militarmente en territorio sirio luego de que Damasco lo pidiera oficialmente.
El mandatario ruso denunció también que la coalición “asestó más de 500 ataques en territorio sirio, se gastaron 500 millones de dólares para adiestrar a los guerrilleros del ELS para combatir al EI, pero no hay ningún resultado”.
Además, criticó a EEUU por negarse a proporcionar datos sobre objetivos que sean “cien por ciento terroristas” en el país árabe: “No, no estamos preparados. Esa fue su respuesta”.
“Entonces, lo pensamos y le hicimos una nueva pregunta. ¿Dígannos entonces adónde no hay que disparar?. Tampoco recibimos respuesta. ¿Pero cómo podemos trabajar con ellos?. ¿Qué hacer?. Me parece que algunos de nuestros socios tienen la cabeza llena de papilla”, afirmó.
Desveló también que en su momento propuso celebrar en Moscú una reunión internacional al máximo nivel político-militar para lograr un arreglo político en Siria, pero que aún no recibieron respuesta.
No obstante, se mostró dispuesto a enviar una delegación a Washington encabezada por el primer ministro, Dmitri Medvedev, que incluyera al subjefe del Estado Mayor del Ejército ruso y representantes de los servicios secretos.
Putin abogó porque Rusia, EEUU y la UE ejerzan influencia sobre todos los implicados en el conflicto sirio para que se sientan en la mesa de negociaciones, aunque reconoció que “por el momento no hemos llegado a ese punto”.
Las declaraciones de Putin tuvieron lugar el mismo día en que la embajada rusa en Damasco fue alcanzada con fuego de mortero, aunque ningún empleado de la delegación diplomática resultó herido, hecho que fue calificado de “atentado terrorista” por el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov.
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