(Dibujo de Diego Mena) Las revueltas en Egipto, Túnez, Yemen, Argelia, etc., totalmente teledirigidas por Washington, se enmarcan dentro del "Proyecto para el Gran Oriente Medio", cuyo objetivo es importar el modelo occidental a estos países, y conseguir una mayor sumisión hacia las entidades financieras y políticas ocidentales. Una buena prueba de ello es la reciente entrega del poder, en Egipto, a los militares, armados y financiados por Estados Unidos e Israel.
Era de esperar que la crisis capitalista no la iban a pagar ellos. El hecho más importante es la clara dependencia que tienen estos regímenes de los EUA e Isrrael y de los narcodólares, pués se ha caido la estantería, apenas los oligopolios han cerrado las canillas del lavado a sus filiales financieras. Al mismo tiempo, han desatado una crisis politica inconmensurable, qué, pese a su unidireccionabilidad inicial, despierta otras fuerzas dormidas del independentismo y el socialismo árabe que va a tener protagonismo a mediano plazo. Esta parte de la historia, todavía la escribirán los fariseos y sus amos, más la propuesta a largo plazo, es de los pueblos, de sus trabajadores y estudiantes, mujeres y hombres, jóvenes y niños...ellos, somos todas y todos en el resto del mundo.Nuestra solidaridad y respeto a las formas y tiempos que decidan las y los militantes y pobladores de esos paises, serán nuestro mejor aporte a la resolución positiva, transformadora, emancipatoria de esas realidades cavernarias que hoy los oprime.
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