EL LIBERTADOR / LA RADIO DEL SUR – Después de participar en una movilización en Tegucigalpa, el conocido miembro del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), fue ejecutado ayer el destacado opositor al golpe de Estado Emoo Sadloo, conocido por el pueblo hondureño en resistencia como “Emo”.
El asesinato ocurrió en el negocio del que era propietario, dedicado a la venta de rines de automóvil, llantas nuevas y usadas. Hasta ahí llegó el sicario que sin mediar palabra atacó a Emo, infiriéndole varios balazos que lo dejaron herido de muerte.
De inmediato, fue trasladado al hospital Escuela, donde murió minutos después. Hasta ahora no hay mayor información, pero los medios de comunicación opuestos al golpe de Estado lo catalogan como “crimen político”.
Trasciende que el delincuente llegó en una motocicleta, cometió el asesinato y huyó del lugar en el mismo medio de transporte.
El expresidente de Honduras Manuel Zelaya condenó el asesinato de Emo y exigió al Gobierno esclarecer el “crimen político” si no quiere quedar en entredicho.
“Nosotros condenamos enérgicamente, con las fuerzas más grandes de nuestros sentimientos de repudio y rechazo el asesinato del compañero ‘Emo’, y responsabilizamos al Estado de Honduras, al Gobierno de Honduras, por el no esclarecimiento de este crimen o por guardar silencio frente a la represión que estamos siendo víctimas a nivel nacional”, dijo Zelaya en una rueda de prensa.
Para el exmandatario, el asesinato de Sadloo es una “declaración de guerra” hacia el (FNRP), cuyos miembros ya “ la paciencia se está terminando, porque hay una indignación sumamente fuerte”.
“Emo es una persona muy cercana a nosotros. Nos sentimos agredidos todos, todos los de la Resistencia nos sentimos agredidos por este asesinato vil, vulgar y criminal”, expresó.
La reacción de la sociedad es de alarma, porque considera que es una amenaza a los miembros del Frente Nacional de Resistencia que se apresta a participar en elecciones para alcanzar el gobierno de Honduras en 2013.
Para el exmandatario, el asesinato de Sadloo es una “declaración de guerra” hacia el (FNRP), cuyos miembros ya “ la paciencia se está terminando, porque hay una indignación sumamente fuerte”.
“Emo es una persona muy cercana a nosotros. Nos sentimos agredidos todos, todos los de la Resistencia nos sentimos agredidos por este asesinato vil, vulgar y criminal”, expresó.
La reacción de la sociedad es de alarma, porque considera que es una amenaza a los miembros del Frente Nacional de Resistencia que se apresta a participar en elecciones para alcanzar el gobierno de Honduras en 2013.
Lo fueron a asesinar a su negocio, llegó un hombre y le infirió seis balazos; este es un crimen político que (el presidente) Porfirio Lobo debe investigar”, dijo el dirigente del FARP Rasel Tomé, reseñó AFP.
Sadloo es uno de los activistas que acompañó a Zelaya en la sede de la embajada de Brasil, donde el ex gobernante se refugió al regresar clandestinamente a Honduras, el 21 de setiembre de 2009, tres meses después del golpe que lo sacó del poder en junio de ese año.
Zelaya salió al exilio a República Dominicana el 27 de enero de 2010, cuando Lobo tomó posesión, y regresó a Honduras el 28 de mayo de 2011.
Cuando Zelaya regresó del exilio, Sadloo subió al estrado para que el ex presidente y líder del FARP le cortara la barba, que se negaba a afeitarse en señal de protesta por el golpe.
Sadloo, de 55 años, nació en Guyana en el seno de una familia de emigrantes de India. En 1976, a los 20 años, se mudó a Honduras, donde se casó con una hondureña y tuvo 10 hijos.
Era propietario de una venta de neumáticos (llantas) de automóvil en el bulevar Suyapa, al este de Tegucigalpa, el cual atendía personalmente.
De larga y canosa cabellera atada con una cinta rojo y negro y de abundante barba, Sadloo se hizo muy popular en el Frente de Resistencia porque se colocó siempre en primera fila en las manifestaciones de protesta contra el golpe de Estado.
La mañana de este miércoles, Sadloo participó en la última movilizacion del FARP, en la que un grupo de activistas protestó frente al edificio de la Corte Suprema de Justicia contra la prisión domiciliaria y la fianza de 1,4 millones de dólares impuesta por los tribunales a Enrique Flores, ex ministro de Zelaya.
“Es un crimen político. Emmo no tenía enemistades personales, se dedicaba honradamente a su negocio y una persona llegó sólo a asesinarlo. Porfirio Lobo tiene que responder por este crimen”, demandó Tomé.
Zelaya salió al exilio a República Dominicana el 27 de enero de 2010, cuando Lobo tomó posesión, y regresó a Honduras el 28 de mayo de 2011.
Cuando Zelaya regresó del exilio, Sadloo subió al estrado para que el ex presidente y líder del FARP le cortara la barba, que se negaba a afeitarse en señal de protesta por el golpe.
Sadloo, de 55 años, nació en Guyana en el seno de una familia de emigrantes de India. En 1976, a los 20 años, se mudó a Honduras, donde se casó con una hondureña y tuvo 10 hijos.
Era propietario de una venta de neumáticos (llantas) de automóvil en el bulevar Suyapa, al este de Tegucigalpa, el cual atendía personalmente.
De larga y canosa cabellera atada con una cinta rojo y negro y de abundante barba, Sadloo se hizo muy popular en el Frente de Resistencia porque se colocó siempre en primera fila en las manifestaciones de protesta contra el golpe de Estado.
La mañana de este miércoles, Sadloo participó en la última movilizacion del FARP, en la que un grupo de activistas protestó frente al edificio de la Corte Suprema de Justicia contra la prisión domiciliaria y la fianza de 1,4 millones de dólares impuesta por los tribunales a Enrique Flores, ex ministro de Zelaya.
“Es un crimen político. Emmo no tenía enemistades personales, se dedicaba honradamente a su negocio y una persona llegó sólo a asesinarlo. Porfirio Lobo tiene que responder por este crimen”, demandó Tomé.
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