La izquierda mexicana acusó este miércoles al Gobierno de ocultar información sobre lavado de dinero durante la pasada campaña electoral e invitó a Enrique Peña Nieto, virtual presidente electo, a debatir con “pruebas” sobre las irregularidades del proceso.
En una rueda de prensa en la capital, Andrés Manuel López Obrador dijo que están aportando muchas pruebas al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para lograr “la invalidez de la elección presidencial por ser, a todas luces, violatoria de la Constitución”.
“Estamos hablando de miles de millones de pesos” de procedencia ilícita dirigidos a la campaña del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para la compra de al menos cinco millones de votos, dijo el candidato del Movimiento Progresista en los comicios del 1 de julio.
“Se puede llegar a conocer toda la verdad. Si nosotros estamos aportando estas pruebas (de las violaciones a la ley), imagínense lo que podrían saber, si no es que ya lo saben, los funcionarios de Hacienda y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores CNBV)”, comentó.
“Ya en el Gobierno federal saben de lo que se trata”, apuntó López Obrador, quien aunque primero sostuvo que se trataba de una hipótesis, luego dijo desconocer por qué “razón no dan a conocer lo que saben sobre el uso del dinero de procedencia ilícita en beneficio de Peña Nieto”.
Pero “no les va a funcionar el ocultar información porque nosotros muy perseverantes y no vamos a quitar el dedo del renglón”, aseveró al dirigirse a los funcionarios del Gobierno federal y magistrados del TEPJF.
Este órgano tiene hasta el 31 de agosto para declarar válidos o no los pasados comicios presidenciales, en los que Peña Nieto obtuvo 19,2 millones de votos, mientras que López Obrador logró casi 15,9 millones.
“No van a poder ocultar este hecho tan reprobable de querer comprar la Presidencia de México”, aseveró López Obrador, quien acusó al PRI de ser “una pandilla que está asaltando el Gobierno de la República y que se quiere quedar con el país”.
Sobre las acusaciones en su contra lanzadas por el PRI de eludir la fiscalización de gastos de su campaña al triangular los recursos a través de organizaciones civiles, dijo que “siempre ha salido ileso de las calumnias” en su contra e invitó a Peña Nieto a debatir sobre el tema con pruebas en la mano este mes o el próximo.
“Invito a Peña Nieto para que, frente a los medios de comunicación, hablemos de este tema, de lo que tenemos, del dinero que poseemos, de nuestros bienes, cómo los hemos adquirido y quién compró votos y quién no en la elección presidencial, con todas las pruebas”, manifestó.
“No tengo duda de que es lavado de dinero”, apuntó el dirigente de la izquierda, quien dijo que esperará a que las “autoridades lo aclaren”.
EFE
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