La Policía ha cargado con gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes frente al Parlamento.
Las calles del centro de Atenas se han convertido nuevamente en un campo de batalla. La Policía griega se ha visto obligada a lanzar gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que han lanzan cócteles molotov y piedras frente al Parlamento, donde el Gobierno quiere sacar adelante un nuevo paquete de recortes profundamente impopulares por valor de 13.500 millones de euros.
La violencia se ha desatado en el entorno de la plaza Syntagma donde se estaba desarrollando una concentración contra las medidas de austeridad impulsada por los sindicatos en el marco de la segunda jornada de huelga general.
VIA Telecinco
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