En materia de protestas populares antigubernamentales, México va al alza. A la ira exacerbada por la desnacionalización del petróleo y los “injustificados” aumentos en el precio de la gasolina (el tanque de un automóvil no se llena por menos de 40 dólares de EE. UU.), ahora se junta la irritación de los pobres y de los segmentos medios de la población del Distrito Federal (Ciudad de México). El motivo es que la tarifa del Metropolitano aumentó 66 por ciento. Los defeños y los mexicanos que habitan en el área conurbada culpan al jefe de gobierno de la capital, Miguel Ángel Mancera, que se ufana de no ser perredista y a quien sus promotores de izquierda le reprochan su “alineación” con las políticas neoliberales impuestas por el bloque derechista al que pertenece el presidente Enrique Peña.
teleSUR
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