viernes, 21 de marzo de 2014

El racismo, la xenofobia y la intolerancia siguen existiendo en el mundo

Manos Unidas alerta de la discrimacion racial y étnica en Africa, América y Asia

















© ERIKA SANTELICES / AFP
Hoy se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, un llamamiento a la reflexión sobre los esfuerzos que se están haciendo para eliminar el racismo, la xenofobia y todas las formas relacionadas con la intolerancia en el mundo.

Manos Unidad denuncia, mediante un comunicado que “en el mundo aún se dan graves situaciones de discriminación racial y étnica”, y destaca “que éstas pueden eliminarse a través de proyectos de desarrollo integrales como algunos de los que la organización realiza en África, América y Asia”.

Entre los proyectos que tiene Manos Unidas con este objetivo se encuentran:

En la localidad de Saparamgutu en Singhbhum Oeste, distrito de Jharkhand (India) se está construyendo una escuela que dará cobertura a 39 aldeas cercanas y un total de 400 niños tribales de entre 5 y 13 años y sus familias, pertenecen a la tribu Ho, una población con escasas tasas de alfabetización, aisladas y mal comunicadas que sufren el abandono por parte del Gobierno, que no facilita las necesidades elementales para el desarrollo digno de estas personas.

En Vietnam, existen 14 grupos minoritarios que representan el 14% de la población. Aunque en 2007 se ratificó el tratado de Naciones Unidas sobre la declaración de derechos de las minorías, no se ha logrado aún ningún avance concreto y estos grupos tienen un limitado acceso a la tierra, al crédito y a los servicios públicos de educación y salud. Para paliar esta situación, Manos Unidas apoya hace tres años el proyecto “Desarrollo comunitario de minorías étnicas en las zonas montañosas del Norte de Vietnam”, beneficiando directamente a 2.000 familias de granjeros y agricultores pertenecientes a los grupos étnicos más pobres y minoritarios.

En República Dominicana, el 43% de sus 10 millones de habitantes vive bajo el umbral de la pobreza y la desigualdad es uno de los principales obstáculos para impulsar el desarrollo. Entre los colectivos más desfavorecidos se encuentra el de los migrantes haitianos y descendientes de haitianos en situación de vulnerabilidad y discriminación social y condiciones precarias.

En la localidad de Biseba, en la provincia de Kasai (República Democrática del Congo), el proyecto “Apoyo a la producción agrícola-alimentaria” que ha finalizado hace unos meses, ha logrado, no sólo formar y capacitar en producción agrícola-alimentaria a 280 familias pobres, sino también la convivencia en armonía de dos de las etnias de la zona, “mwene tshilengi” y “binene”, que habitan en poblados vecinos y se consideraban mutuamente como “enemigos”.

0 comentarios:

Publicar un comentario