El presidente de México, Enrique Peña Nieto, está de visita por el Reino Unido. Invitado por la reina Isabel II de Inglaterra, Peña Nieto trata de mejorar las relaciones comerciales mientras se enfrenta a las críticas por la sistemática violación de derechos humanos que sufre su país.
Enrique Peña Nieto se encuentra en el Reino Unido tras una invitación de la reina Isabel II. Enmarcada en el año dual México-Reino Unido, la visita de tres días del presidente mexicano pretende reforzar las relaciones comerciales y culturales entre ambos países.
Es una visita en la que la firma de varios tratados en materia de educación y turismo o la reforma del sector energético de México, comparten protagonismo con protestas por la corrupción, la violación de derechos humanos, y la falta de justicia en el país hispano.
Bajo el lema “Peña Nieto no es bienvenido”, el grupo de estudiantes mexicanos y simpatizantes “Yo soy el 132” protestaron junto a la residencia del primer ministro británico, David Cameron, por la visita, por los 43 estudiantes desaparecidos en septiembre en el estado de Guerrero (sur de México), y por las mas de 100.000 muerte generadas, según Amnistía Internacional (AI), por la lucha contra el narcotráfico.
La apertura del sector energético a empresas europeas, la cual beneficiará presuntamente solo a aquellas empresas mexicanas con más influencias, no es el principal factor de molestia entre los protestantes, sino el hecho de que se reciba con los máximos honores al presidente de un país donde la tortura es algo generalizado y la violación de derechos humanos se produce de forma sistemática.
Aunque el portavoz del primer ministro británico afirmó que David Cameron pondría el tema sobre la mesa, los protestantes afirman que el respeto a los derechos humanos debería tener un papel más importante en las relaciones comerciales.
Tras el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado entre México y la Unión Europea (UE) en el 1997 que vincula la mejora de los derechos humanos en México con sus relaciones comerciales, se verá si la reunión de Peña Nieto con representantes del sector del gas y del petróleo del Reino Unido mejora la situación de los derechos humanos en México, o solo las cuentas bancarias de empresas europeas.
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