Primero, Islandia encarceló a sus banqueros deshonestos, por su participación directa en la crisis financiera de 2008. Ahora, cada islandés recibirá un pago por la venta de uno de sus tres mayores bancos, el Íslandsbanki.
Si el ministro de Finanzas islandés Bjarni Benediktsson se sale con la suya, algo muy probable, cada islandés recibirá un pago de 30,000 coronas islandesas (unos 212 euros) después de que el gobierno se hiciera cargo de la propiedad del banco. El Íslandsbanki sería el segundo de los tres bancos más grandes bajo propiedad estatal.
Bjarni Benediktsson
El ministro está proponiendo que el gobierno tome un 5% del valor de la venta y la reparta directamente entre los habitantes del país.
“Estoy diciendo que el gobierno tome una porción decidido, el 5%, y simplemente entregarla a la gente de este país”, afirmó.
Aún no se ha establecido de forma firme esta propuesta, pero el revolucionario enfoque de Islandia a la hora de hacer frente a la crisis financiera internacional de 2008, con todas sus imperfecciones, debería avergonzar al resto de países de Europa y a sus corruptos mandatarios.
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