Hasta el momento, las protestas contra la investidura del 45.º presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se han saldado con dos policías heridos y unos 100 manifestantes detenidos.
Los datos oficiales indican que algunas de las personas que protestan han formado grupos bien coordinados y han empleado martillos y barras metálicas, con lo cual los agentes han utilizado gas pimienta para tratar de disolver a esos colectivos. El foco de los enfrentamientos se encuentra en el cruce de las calles 12 y L, a un par de cuadras del lugar donde transcurrirá el desfile en honor del mandatario recientemente investido.
La policía ha usado gases lacrimógenos para dispersarlos. El escaparate de un café Starbucks ha quedado completamente roto. El grupo ha burlado la vigilancia de las fuerzas de seguridad y ha cambiado en el último momento su ropa, poniéndose capuchas y fulards negros, característicos del grupo radical “Black block”.
El grupo estaba formado por unas 150 mpersonas, vestidas de negro y algunas de ellas con máscaras, han marchado por el centro de la ciudad rompiendo escaparates y ventanillas de coches y formando barreras en las calles con los cubos de basura.
Unas 900.000 personas esperaban frente al Capitolio, lugar donde todos los presidentes son investidos, y a lo largo de la Avenida Pensilvania y otros lugares del centro de la ciudad.
Un grupo denominado “Disrupt J20” (‘Interrumpir el 20 de enero’) bloquearon varios puntos del recorrido donde se agolpaba la gente. Varios de ellos fueron retirados por la policía.
La organizadora del grupo Alli McCracken, de 28 años, afirmó que están expresando su disgusto por los polémicos comentarios de Trump sobre mujeres, inmigrantes ilegales y musulmanes. “Aquí hay mucha gente de orígenes diversos que están contra el imperialismo estadounidense y sentimos que Trump continuará con ese legado”, dijo.
Agencias
0 comentarios:
Publicar un comentario