El artículo se divide en dos partes: en la primera, el columnista Ian Greenhalgh, ofrece su punto de vista sobre los acontecimientos y desde el punto de vista del Robot, se trata de un punto de vista bastante exagerado en sus conclusiones (pero juzguen por sí mismos).
En la segunda parte, se expone el cuerpo de la información, centrada en una presunta oferta israelí para comprarle el Sinaí a Egipto y desterrar ahí a gran parte de la población palestina y la censura en Egipto del periódico que ofrecía dicha información…
Nota del editor: Desde hace años, en la región del Sinaí de Egipto, ha habido un problema de “terrorismo” en gran parte ignorado, ya que los supuestos combatientes del “Estado Islámico” han llevado a cabo una larga serie de ataques contra la población local.
Ahora podemos ver claramente la razón por la que se ha llevado a cabo esta campaña del Estado islámico: presionar a Egipto para que venda el Sinaí a Israel.
No hay duda de que Israel está detrás de la violencia del Estado islámico en el Sinaí y ahora sabemos por qué Israel ha estado llevando a cabo esta campaña encubierta.
Expulsar a la población palestina indígena restante de las tierras robadas ahora llamadas Israel ha estado en la agenda de Bibi Netanyahu y de la derecha israelí durante décadas; podrían haber planeado expulsar a los palestinos hacia Siria, una vez Estado islámico y los diversos grupos “rebeldes” hubieran conseguido derrocar a Assad y fragmentar Siria en varios pequeños estados sin poder, vasallos de Israel. Sin embargo, ese plan ha ido mal, Assad sigue en el poder y está cerca de la victoria en el terrible conflicto que ha devastado a Siria.
La obtención del Sinaí y la deportación de los palestinos hacia dicha región, probablemente es un plan B y parece ser la nueva opción para la ‘Solución Final’ de la cuestión palestina.
Por supuesto, tal deportación sería amargamente opuesta por el mundo árabe y sus aliados alrededor del globo; Sin embargo, sería difícil hacer mucho para oponerse a tales deportaciones si las potencias mundiales se distraen con una guerra importante.
Por lo tanto, predigo que, si Netanyahu y Trump consiguen ingeniar una guerra para salvar sus propios culos de las investigaciones en curso a las que están siendo sometidos respectivamente, Israel aprovechará la oportunidad para deportar a los palestinos al Sinaí, contando con la distracción causada por la guerra.
La violencia actual y las travesuras que rodean el Monte del Templo en Jerusalén han sido claramente diseñadas por Netanyahu, que bien podría haberlo diseñado como un pretexto para provocar una nueva Intifada palestina, proporcionando así a Israel un cassus belli para llevar a cabo una campaña militar que incluya deportaciones a gran escala.
Ian Greenhalgh
El gobierno israelí supuestamente ha estado tratando de comprarle partes del Sinaí al gobierno de El Cairo, lo que llevó a las autoridades a censurar un reportaje de un periódico egipcio, que hablaba sobre dichas ofertas.
Israel ha hecho una serie de “ofertas atractivas” para adquirir la gigantesca provincia, según informó el periódico al-Masryoun, lo que llevó a que la policía militar cerrara la impresión del periódico.
La Constitución de Egipto prohíbe expresamente el establecimiento de una oficina de censura, pero las autoridades, según los informes, consiguieron paralizar la publicación de todos modos.
Según el informe, el gobierno israelí ha ofrecido reubicar a algunos palestinos en la región recién comprada.
El Sinaí se enfrenta a problemas de seguridad interna, debido a los constantes ataques de militantes armados jihadistas vinculados al grupo Estado islámico.
Esta no es la primera vez que la idea sobre este plan de compraventa, surge en los últimos meses. El ministro de Comunicaciones de Israel, Ayoub Kara, habría discutido planes con El Cairo para trasladar a los palestinos a la región del Sinaí en febrero.
“Trump y Netanyahu adoptarán el plan de Egipto (del presidente Abdel Fattah al-Sisi). Un estado palestino en Gaza y el Sinaí, en lugar de estar situado en Judea y Samaria”, dijo Kara.
El plan había sido presentado antes, pero siempre fue rechazado de plano, debido a que sería extremadamente impopular en los estados árabes vecinos.
Israel ocupó anteriormente la península del Sinaí desde 1967 hasta 1982 y finalmente devolvió la tierra legalmente en 1989.
Desde ese retiro, la península ha experimentado poco desarrollo o asistencia financiera desde El Cairo, con poca o ninguna creación de empleo para sus habitantes.
La crisis económica ha dado lugar al crimen organizado, ya que algunas tribus locales en la península, se vieron obligadas a vivir del contrabando para ganarse la vida.
Desde la revolución de 2011, que derrocó al presidente Hosni Mubarak, la región ha experimentado levantamientos cada vez más violentos, que culminaron con el ascenso del Estado islámico.
Una serie de ataques contra la población cristiana copta de Egipto y otros objetivos políticos, se han ido produciendo.
Los disturbios han llevado a Israel a coordinar las operaciones militares con las tropas egipcias en el Sinaí en los últimos años (lo que vendría a ser un primer paso hacia esa compra final de toda la península o al menos de gran parte de ella).
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