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Los indignados de Salamanca, acampados en la Plaza de la Constitución, también fueron apaleados ayer al sufrir una brutal carga de la Policía Local que se saldó con 5 heridos. De la vuelta hacia la acampada de un acto de carácter religioso organizado en el Aula Cultural de Caja Duero en el que participaban el presidente de la Fundación Interconomía, Alfredo Dagnino, y el obispo de Salamanca, Carlos López, los indignados empezaron a gritar proclamas de manera pacífica. Varios agentes de la Policía local y policías secretas, acordonaron la calle Toro, en los aledaños de la Plaza Mayor. Uno de ellos amenazó a una de las manifestantes: "o te callas o te doy una hostia". Uno de los manifestantes sacó un teléfono para grabar lo ocurrido y entonces se produjo una carga policial muy agresiva por parte al menos siete policías locales, otros cuatro de ellos sin identificación y cinco secretas con porras, patadas, y gas pimienta. La policía local calificó el enfrentamiento como "rifirrafe". El movimiento ya ha convocado para hoy por medio de Twitter (#acampadasala y @salasinmiedo) y Facebook una concentración a las 11.00 en la Plaza de la Constitución para denunciar, bajo el lema "No tenemos miedo", lo sucedido. |
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