El ciudadano mexicano José Alvano Pérez Bautista fue detenido en Madrid acusado de intentar atentar contra la marcha laica llevada a cabo el miércoles 17, apenas un par de días le bastaron...
El ciudadano mexicano José Alvano Pérez Bautista fue detenido en Madrid acusado de intentar atentar contra la marcha laica llevada a cabo el miércoles 17, apenas un par de días le bastaron al militante ultraderechista para que su abogado lo sacara de la cárcel aduciendo una simple broma. Sin embargo el acusado tiene los conocimientos necesarios para llevar acabo lo prometido y su actividad en el ciberespacio no deja dudas de su postura radical cargada de odio en contra de quienes piensan distinto dejan claro que José es uno más de tipo del noruego ultra terrorista Anders Behring Breivik, algo que no debe de sorprender a nadie, la ultraderecha conservadora a sembrado y hoy recoge.
En México el huevo de la serpiente no despareció jamás, desde los días de la Nueva España la rancia burguesía conservadora que a sangre y fuego combatió a los insurgentes se perpetuo en distintas formas en el México independiente, de realistas a monárquicos y luego centralistas, de ahí a los conservadores que forzaron una sangrienta guerra civil, para terminar imponiendo un emperador extranjero, reconvertidos luego en el elemento científico del Porfirismo, trasladado al ala derecha del Carrancismo, apareciendo de nuevo como la oposición ultracatólica que desató las guerras cristeras y que luego se agrupo en la oposición al Cardenismo, después de esa nueva derrota las posturas más radicales permanecieron en la clandestinidad durante casi 60 años, mientras sus agrupaciones legales se hacían con el poder económico-empresarial, para por fin en el 2000 con el priismo en plena decadencia asumir el control del país mediante Acción Nacional.
En el México del año 2011 se movilizan pequeñas células neofascistas de distinto caris, sinarquistas, ultranacionalistas católicos, neonazis orgullosos de su descendencia europea o criolla, los hay incluso quienes mezclan las ideas de la raza cósmica de Vasconcelos con las de Hitler, o la cruz gamada con glifos prehispánicos, de todos estos grupúsculos los más preocupantes comparten su odio hacia los no católicos, a los izquierdistas de todo signo, y a quienes se atreven a criticar la guerra calderonista, en la red se muestran defensores a ultranza de la presencia militar en las calles del país, estos grupos casi podrían pasar como inofensivos si no fuera porque al amparo de los 11 años de gobierno panista y con el apoyo de altos funcionarios federales, entre los que se menciona a Cecilia Romero, actual secretaria general del PAN y ex directora del Instituto Nacional de Migración, han crecido pasando a ser las radicales bases de apoyo del gobierno panista, que desde el anonimato profundizan la campaña de odio con que la ultraderecha mexicana pretende conservar el poder político.
La información que se puede obtener de José Alvano muestra a un chico acomodado, egresado de la licenciatura de ciencias químicas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), becado en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas con sede en Madrid, en donde vive plácidamente en el exclusivo barrio de Salamanca, así que, ¿qué puede conducir a alguien así, con una perspectiva de vida muy superior a la de millones de mexicanos, a plantearse un asesinato en masa?, porque el cuento de que todo era una broma no cuadra con las sandeces que escribe en internet: “Les adelanto, tengo disponible 200 litros de ácido clorhídrico y unas 50 botellas de bromuro de bencilo, con esto podemos hacer una buena mezcla asficciante, pero nesecito más gente para distribuir contenedores de medio litro entre esas porquerías desechos de vida que se manifestarán en contra de la iglesia, y espero esta noche poder extraer del almacén unos cuantos kilos de gas cloro para esparcilo (sic) en ampolletas de 100 mililitros, animo, tenemos menos de ocho días para organizarnos, a matar maricones y en nombre de Dios”.
Particularmente el caso de este connacional resulta preocupante en un punto específico, entre su actividad cibernética revelada, se encontró actividad relacionada con la promoción de grupos paramilitares que actuarían en acciones conjuntas con las fuerzas federales, algo que no es nuevo, pero que si revela que tan relacionados y radicalizados están estos católicos y patriotas mexicanos.
Los continuos llamamientos escritos en la red por este “guerrero de dios”, develan un ejemplo de la formación recibida por jóvenes aleccionados en la derecha católica militante, un discurso de odio carente de sentido, que ni siquiera se preocupa de buscar justificaciones coherentes, quizá porque saben bien que no las necesitan pues cuentan con el apoyo de gobiernos, partidos políticos y empresarios, en México y el estado español, exactamente igual que hacen los grupos ultras en la Europa protestante o en los Estados unidos, donde los distintos grupos racistas ultraconservadores se benefician del impulso proporcionado por el Tea Party.
La mezcla de intolerancia religiosa, racismo y posturas ultraderechistas tiene vía libre en occidente, Estados Unidos no alistara una coalición multinacional que de caza a estas células terroristas, integristas cristianos, católicos y protestantes tienen vía libre para odiar y matar, después de todo son las bases que sostienen al sistema, su odio irracional permite que sean usados como carne de cañón por quienes obtienen los beneficios económicos, nada más basta ver el silencio y la manipulación mediática que se encarga de exaltar la violencia de las izquierdas radicales, los excesos integristas en el islam, o la naturaleza malvada de los regímenes enemigos (Cuba, Libia, Siria o Venezuela) , mientras justifica los crímenes de sus aliados, llámense sionistas, panistas, populares, republicanos, sauditas o socialistas, los occidentales no deben buscar al enemigo entre los anarquistas, los comunistas o los musulmanes, el enemigo no está en Irak ni Afganistán, el enemigo, el terrorista está en casa y cualquier día puede atacar.
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