Participarán miles de alemanes en protesta contra mensaje del Papa

“No criticamos ni la religión católica, ni a sus fieles. Protestamos contra el discurso del Papa frente al Parlamento alemán”, argumentó, Jörg Steinert.




Berlín.- Entre 15 y 20 mil personas se espera que participen en Berlín en una protesta en contra del “mensaje político” del Papa Benedicto XVI, el próximo 22 de septiembre, en ocasión del discurso del Pontífice frente al Parlamento alemán.
La protesta, que reunirá a unas 60 asociaciones laicas, fue anunciada bajo un título neutro, “Llega el Papa”, y es que según sus patrocinadores apunta a juntar una base más amplia posible.
El mensaje, anunciado en material informativo que se distribuye por Berlín es simple: “En septiembre de 2011, el Papa visita Alemania.
También hablará frente al Parlamento en Berlín. Nosotros estamos en contra”.
“No criticamos ni la religión católica, ni a sus fieles. Protestamos contra el discurso del Papa frente al Parlamento alemán”, argumentó esta mañana, Jörg Steinert, de la asociación de hombres homosexuales y lesbianas (LSVD), en un encuentro celebrado con la Asociación de Prensa Extranjera en Berlín.
La iniciativa nació de una idea de la LSVD a comienzos de este año: “mandamos una carta a todas las asociaciones que podrían estar interesadas, y contestaron unas veinte.
Con ellas hemos organizado el evento”.
Entre ellas figuran la asociación “Pro Familia”, que defiende la “autodeterminación sexual”, la “Asociación Humanista Alemana”, y la asociación CSD para la multiplicidad sexual.
“Con nuestra protesta no queremos discutir de asuntos morales, sino de aspectos prácticos de la vida de todos los días”, dijo Steinert.
Entre ellos, la discriminación de los homosexuales y de las mujeres en las jerarquías eclesiásticas.
No es una casualidad que la protesta tenga lugar el día 22, y no en ocasión de la misa de Benedicto XVI en el Olympiastadion: “no nos interesa molestar la misa”, añadió el representante de LSVD.
El Papa fue invitado a hablar frente al Bundestag como jefe de Estado Vaticano y no como jefe de la Iglesia Católica, según se argumentó desde el gobierno.
Ya se dio a conocer que su mensaje tendrá que ver con Europa y también con la Crisis.
Será pues un mensaje social y político, en un país donde la división entre poder y religión está considerada intocable.
“No podemos aceptar la dimensión política que adquirió la visita del Pontífice, remarcó esta mañana Thomas Hummitzsch, de la Asociación Humanista, “su discurso en el Parlamento alcanza un nivel nuevo”.
El mensaje de una personalidad como el Pontífice choca con la Constitución alemana, según los representantes de esta protesta.
Ello, destacaron, porque Benedicto XVI sigue difundiendo un legado contrario a los homosexuales, pero también al aborto y a los anticonceptivos, todos aspectos que ya están cumplidamente aceptados y codificados en este país.
“Sucedió la semana pasada en Berlín: una empleada fue despedida de una escuela católica por ser lesbiana.
Esto responde al mensaje del Papa pero es contrario a la ley de este país. También las escuelas católicas son públicas y reciben subvenciones”, destacó Robert Kastl, de la asociación CSD.
No toman parte de esta manifestación los grupos de católicos reformadores que son muy numerosos en Alemania, “aunque su mensaje es muy parecido al nuestro”, destacó Günther Dworeck de LSVD, “trabajan de manera distinta, más desde adentro, pero en la misma dirección”.
“Muchos de ellos estarán presentes como individuos pero no como asociación”, añadió Dworeck, quien quiso dejar en claro que “no se trata de una manifestación atea”.
La protesta debería arrancar en la Puerta de Brandeburgo, a pocos metros del Parlamento, sin embargo, en espera de la aprobación oficial, se considera también desplazarla a la cercana Potsdamer Platz.
También frente a los eventos violentos que tuvieron lugar en Madrid con ocasión de la última visita de Benedicto XVI, la organización de la iniciativa “Llega el Papa” exigió que se firmara un documento de “no violencia”.
A pesar de esto, tampoco los organizadores pueden excluir la infiltración de grupos de autónomos de izquierda, de quienes se sabe que preparan protestas con ocasión de la visita del Papa.
Unas 50 personas encargadas de la seguridad fueron predispuestas por las asociaciones, estarán encargadas de alertar la policía.
También estarán presentes, en esta ocasión, asociaciones de víctimas de abusos en estructuras educativas católicas, que paralelamente conducen su propia protesta para obtener indemnizaciones y denunciar el encubrimiento de los crímenes en la Iglesia.
El Papa visitará Alemania entre el 22 y el 25 de septiembre: según fuentes del Vaticano, asistirán unas 250 mil personas a las misas programadas en Erfurt, Freising y Berlín, de ellas unas 70 mil se esperan en el Olympiastadion (Estadio Olímpico) de la capital alemana.