Más de 30.000 personas marchan por Atenas en una protesta que ha acabado con gases lacrimógenos.
Kaos. Internacional
Decenas de miles de personas recuperaron hoy el lema "Pan, enseñanza y libertad", utilizado contra la dictadura de los coroneles, para protestar contra la política de recortes que imponen los acreedores internacionales a Grecia y que han disparado el paro a un nivel histórico del 18 %.
Unas 28.000 personas, según la policía, y 35.000, de acuerdo con los manifestantes, marcharon por el centro de Atenas para conmemorar los 38 años de la revuelta estudiantil contra la Junta Militar (1967-1974), lo que se vio ensombrecido por incidentes violentos entre participantes y agentes.
Las marchas conmemorativas del levantamiento estudiantil de 1973 contra la dictadura militar se presentaron como una advertencia al nuevo Gobierno griego de transición de que no insista en las medidas de austeridad que han ahondado la depresión económica en un país que está en su cuarto año de recesión.
Al final de la marcha, elementos radicales se enfrentaron con agentes antidisturbios, lo que llevó a la detención de 60 personas y ocasionó cuantiosos daños materiales.
Más de 7.000 agentes se encontraban desplegados por las calles que llevan al Parlamento y a la embajada de EEUU en Atenas y varios retenes intervinieron con gases lacrimógenos para dispersar a grupos de radicales, según la policía.
Algunos manifestantes arrojaron huevos, piedras y bombas incendiarias contra los policías apostados a lo largo del recorrido de la manifestación, prendieron fuego a una garita de guardia frente a las oficinas de la Comisión Europea, incendiaron a su paso contenedores de basura y rompieron los escaparates de varias sucursales bancarias.
"Espiral de muerte"
Los sindicatos han indicado que usarían la marcha de este año para enviar una advertencia a Papademos, un ex vice presidente del Banco Central Europeo (BCE) sin experiencia política, para que dé marcha atrás con políticas que dicen han enviado a Grecia a un "espiral de la muerte".
"Han recortado mi pensión dos veces. Este hombre, Papademos, es peor que el líder previo. Es un banquero. Si se atreve a tomar cualquier otra medida de austeridad, los echaremos", indicó Xeni Kolen, un pensionado de 64 años.
"Si se atreve a tomar cualquier otra medida de austeridad, los echaremos". Tres de cada cuatro griegos respalda a Papademos, señalaron sondeos de opinión. Pero el responsable enfrenta una ardua tarea al mantener su coalición alineada detrás de las reformas requeridas bajo un rescate de 130.000 millones de euros destinados a prevenir una desastrosa suspensión de pagos.
"Los griegos y sobre todo, los jóvenes pueden superar la crisis y lograr metas nacionales si están unidos y actúan con decisión", dijo Papademos al parlamento más temprano el jueves.
Falta de consenso
Las grietas ya se están asomando en la coalición, armada después de que los acreedores de la zona euro rechazaran la semana pasada un plan del primer ministro Georgios Papandreu de realizar un referéndum nacional sobre el rescate.
El líder de los conservadores de la Nueva Democracia, Antonis Samaras, cuyo partido está por delante de sus rivales en los sondeos de opinión, aclaró que su apoyo a la coalición fue sólo temporal y que se estaba preparando para una elección programada para el 19 de febrero.
Samaras enfureció a los socios de Grecia en la UE por oponerse a medidas buscadas por el anterior Gobierno socialista de Papandreu para rechazar la suspensión de pagos.
Muchos griegos culpan a los dos principales partidos, que dominan la política local desde la caída de la junta, por alimentar la deuda que alcanza los 370.000 millones de euros, o un 160 por ciento del Producto Interior Bruto. Pero el Gobierno de Papademos, fuertemente respaldado por la Unión Europea, es vulnerable a acusaciones por su falta de legitimidad debido a que no fue escogido por los votantes.
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