111 fotógrafos fueron víctimas de actos violentos de la Policía turca entre el 31 de mayo y el 8 de julio en protestas antigubernamentales en las ciudades de Estambul y Ankara: varios fueron detenidos, otros atacados, incluso la Policía borró material de trabajo de algunos.
Según el informe de la Asociación de Fotógrafos que reúne testimonios de numerosos fotógrafos de documentales y de prensa, la mayor parte de las heridas de los trabajadores de la prensa se debe a tanques de gas y balas de gomas lanzados por las fuerzas de seguridad durante la brutal represión policial.
Numerosos fotógrafos, asimismo, han denunciado que sus cámaras han sido quebradas o que sus fotos han sido borradas.
Añade el informe que en muchos casos las tarjetas amarillas de la prensa no impidió el arresto de fotógrafos.
Emrah Güler y Selçuk Şamiloğlu, fotoperiodistas del diario turco Hürriyet, se encuentran entre los heridos mientras se esforzaban en cubrir protestas que se iniciaron por la reurbanización del parque Gezi, en Estambul.
Desde finales de mayo, los turcos realizan protestas antigubernamentales a nivel nacional, las cuales han sido brutalmente reprimidas por las fuerzas del orden. Como consecuencia, varias personas, entre ellas un policía han perdido la vida, y otras 7500 han resultado heridas. Además, se han producido centenares de detenciones.
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