“La reciente declaración de la Casa Blanca y la aprobación de un nuevo paquete de sanciones contra Teherán evidencian que los funcionarios norteamericanos carecen de una comprensión apropiada de las realidades de Irán y del mensaje de las (últimas) elecciones presidenciales”, dijo el mandatario en su primera rueda de prensa.
Consideró que “los halcones de Washington buscan más los intereses de un país extranjero y reciben órdenes de ese país”, sentenció el mandatario en evidente alusión a Israel y los grupos de poder pro Tel Aviv que actúan En Estados Unidos.
Las formulaciones aluden a una propuesta a la Casa Blanca de la Cámara de Representantes, la cual estima que “sería un error no probar si la elección del señor Rohani representa una oportunidad de progreso hacia un acuerdo verificable”.
Asimismo, recomienda que Estados Unidos emplee todas las herramientas para revigorizar las conversaciones nucleares.
Muestran actitudes contradictorias y sus mensajes no marchan paralelos en palabras y acciones, añadió el mandatario.
Reveló en ese sentido que su gobierno seguirá las acciones de la administración norteamericana y dará respuestas apropiadas y similares a las acciones prácticas, constructivas y significativas de la otra parte, si surgieran.
En cuanto a la política de su Gobierno reiteró que estará basada en el consenso nacional combinado con la firme decisión de proteger los derechos de la Nación a través de la interacción activa y constructiva.
Estados Unidos y sus aliados de la Unión Europea han aplicado a Irán cuatro series de sanciones punitivas financieras, diplomáticas y políticas a pesar de las garantías proporcionadas por Teherán de que su programa de desarrollo nuclear tiene fines pacíficos.
Cubadebate
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