Italia amaneció paralizada y la ciudad de Roma (capital), fue el escenario para que miles de ciudadanos se revelaran en contra de las políticas económicas que implementa el Gobierno en los sectores públicos del país. Las acciones se llevan a cabo cuatro días después de presentarse el presupuesto 2014.
Transportistas públicos de Italia llevan a cabo este viernes un Paro Nacional de 24 horas contra la llamada ley de Estabilidad del Ejecutivo, que prevé recortes de gasto en el sector público; razón suficiente para que otros miles de ciudadanos también salieran a las calles a protestar contra esta política económica gubernamental.
El presupuesto del premier italiano para 2014, presentado el martes, se convirtió en el punto central de este descontento social, puesto que los sindicatos se quejan de la congelación salarial en el sector público.
"Con este presupuesto, el Gobierno continúa dañando un país que ya está de rodillas", aseguró el portavoz nacional de los sindicatos de base Cobas, Piero Bernocchio, quien recordó que la economía está en recesión desde hace años.
En este sentido el sindicalista, comentó que los salarios de los trabajadores han perdido más del 30 por ciento de su valor desde el inicio de la crisis en 2008.
Mientras tanto en el centro de Roma (capital), miles de personas participan en una manifestación contra la política económica gubernamental, motivo por el cual las autoridades procedieron a detener y expulsar a cinco militantes anarquistas de nacionalidad francesa; además los funcionarios lograron confiscar un camión lleno de palos y otros materiales.
Al respecto, la jefatura de la policía confirmó que los cinco franceses expulsados "son profesionistas del desorden", y que dos de ellos tienen antecedentes por terrorismo en su propio país; al tiempo que comentaron que las fuerzas del orden público capitalino se mantienen en alerta máxima ante la gran manifestación que los civiles italianos tienen planeado para este sábado.
Por otra parte medios locales, informaron que los servicios de trenes han estado garantizados en la mayoría de las ciudades, pero los aeropuertos de Roma (capital), Nápoles (Sur), Milán (noroeste) y Bolonia (norte) han tenido que cancelar cientos de vuelos.
Tan sólo en el aeropuerto de Roma-Fiumicino han sido cancelados 143 vuelos, sobre todo de Alitalia. Algunos colegios y trabajadores de la salud también hicieron un paro.
teleSUR-HispanTV-Notimex/ba-GP
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