Subasta petrolera en Brasil en medio de protestas populares

Pese al descontento del gremio petrolero brasileño y al anuncio de manifestaciones, el Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff ha decidido celebrar este lunes la subasta del Campo petrolero Libra en medio de extremas medidas de seguridad.


La subasta del Campo Libra se celebra este lunes en el hotel Windsor, ubicado en la zona de Barra da Tijuca, en el oeste de Río de Janeiro.

Ante las amenazas de los trabajadores del sector petrolero de impedir la operación, el Gobierno ordenó la semana pasada extremar medidas de seguridad. De hecho, ha desplegado a más de 1100 soldados en los alrededores del lugar del evento para garantizar la licitación del campo petrolero más importante del país.

Según la Agencia Nacional de Petróleo (ANP), nueve compañías participarán en la subasta, la primera subasta que se efectúa en el país bajo el llamado régimen de división de la producción que sustituyó al de concesión, el cual establece la participación obligatoria de la petrolera brasileña Petrobrás con el 30 por ciento de las acciones.

Ante la decisión de licitar dicho campo, los trabajadores la Federación Única de Petroleros (FUP), apoyados por estudiantes universitarios y movimientos sociales, reaccionaron con rechazo, pues consideran que venden los recursos nacionales cuando Petrobrás tiene condiciones y capacidad para explotar este campo. También anunciaron un paro indefinido de labores desde el 17 último para obligar al Gobierno a suspender la subasta.

El Campo Libra es considerado como el más importante de Brasil, con reservas estimadas de hasta 12 mil millones de barriles de crudo, equivalentes al 70 por ciento de las provisiones actuales del país.

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