Marco Rubio es un senador norteamericano del Partido Republicano y declarado enemigo de Venezuela y de su Gobierno democrático. Este funcionario constantemente agrede al país suramericano con declaraciones injerencistas y exigiendo sanciones unilaterales.
El Ministerio de Comunicación e Información (Minci) de Venezuela denunció al senador norteamericano Marco Rubio por “mentir descaradamente” al Congreso de su país, presentando una foto, que data del año 2013, de un militar venezolano de resguardo del Palacio de Miraflores (sede del Gobierno), como si fuera una imagen de francotiradores.
El ente oficial repudió que Rubio expusiera ante el Senado estadounidense un presunto informe sobre la situación en Venezuela “lleno de inexactitudes, falsedades y mentiras palmarias”, entre ellas la foto mencionada.
De igual manera, el Minci destacó que si esa manipulación de Rubio se hubiera cometido en cualquier otro país del mundo, “sería considerado como un grave delito por haberlo consumado en una audiencia pública de una institución oficial”.
El Ministerio explicó que la imagen original fue tomada por el fotógrafo Juan Barreto, de la agencia francesa AFP, el 19 de noviembre de 2013, cuando el presidente Nicolás Maduro recibió poderes especiales por parte de la Asamblea Nacional mediante la Ley Habilitante.
Senador Marco Rubio mintió esta semana al Congreso #EEUU cuando presentó foto 2013 #Venezuelacomo si fuera reciente.
Rubio, declarado enemigo de Venezuela y de su Gobierno democrático, constantemente agrede al país suramericano con declaraciones injerencistas. En esta ocasión, mintió al mostrar la imagen como si se tratara de una actuación represiva de las fuerzas militares en el estado Táchira (oeste), escenario de violentas protestas de la ultraderecha.
Asimismo, el senador aprovechó sus mentiras para solicitar al Congreso norteamericano imponer sanciones contra Venezuela y contra algunos miembros del Ejecutivo Nacional.
En reiteradas ocasiones, durante las últimas semanas, el presidente Nicolás Maduro y el Gobierno Bolivariano han rechazado y condenado, de manera categórica, las declaraciones injerencistas de funcionarios estadounidenses que insisten en amenazar a Venezuela con posibles sanciones económicas.
Días atrás, la subsecretaria de Estado, Roberta Jacobson, advirtió que la Casa Blanca podría sancionar al Ejecutivo venexolano “si no abre espacios para el diálogo”. Sin embargo, todas las iniciativas de diálogo, surgidas en los últimos meses, son producto de la voluntad del Gobierno Bolivariano de conversar con todos los sectores de la sociedad.
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