Miles de mujeres participaron hoy en una veintena de ciudades brasileñas de la ya tradicional “Marcha de las Putas”, que tiene por objetivo defender la igualdad de derechos entre hombres y mujeres y alertar sobre la violencia sexual, psicológica y física que sufren las mujeres.
En Brasilia, unas 3.000 personas, según la policía militarizada, se congregaron para expresar sus reivindicaciones, en un acto que contó con acompañamiento de tambores, disfraces y pancartas.
“Queremos derechos iguales (a los de los hombres). Si ser libre es ser puta, entonces todas somos putas”, dijo la diputada del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT, de gobierno), Érika Kokay, en declaraciones que reproduce la agencia oficial de noticias ABR.
En Río de Janeiro, la marcha, que concentró a unas 1.000 personas, abogó por la despenalización del aborto y en contra del machismo de la sociedad.
Usando poca ropa y maquillaje provocativo, las participantes entonaron cánticos que defendían la libertad de usar la ropa que prefieran sin ser discriminadas por ello.
“Yo sólo quiero ser feliz, andar tranquilamente con la ropa que elegí y poder asegurar, de burka o de ‘short’ todos me van a respetar”, eran algunas de las consignas que pudieron escucharse durante la marcha, junto a otra que también ganó la adhesión del público: “Nuestra lucha es por respeto. La mujer no es solamente trasero y pechos”.
La primera “Marcha de las Putas” fue organizada hace un año en Canadá, por estudiantes de la Universidad de Toronto, después de que un policía declarara durante una conferencia, de que las violaciones podrían ser estimuladas por el hecho de que las mujeres usen ropa “de puta”, como escotes generosos o faldas cortas.
“Ya es hora de que la sociedad entienda que si el hombre puede andar sin camisa, ¿por qué las mujeres son llamadas de putas y menospreciadas o disminuidas en su valor porque estén usando ropa más fresca en un país como Brasil?”, dijo al respecto una de las organizadoras del evento en el estado fluminense, donde según datos del Instituto de Seguridad Pública al menos 15 mujeres fueron violadas por día en 2011, en toda la provincial.
Una de las coordinadoras del evento, citada por el portal G1 de la red Globo, alertó a propósito de que esa cifra es menor a la real, ya que muchas mujeres sufren violencia sexual en su propia casa y tienen miedo o vergüenza de denunciar el hecho.
“Las que llegan a la comisaría son, la mayoría de las veces, culpadas por la violencia sufrida”, denunció la activista.
También en Sao Paulo el movimiento contó con la participación de centenas de personas que marcharon por la Avenida Paulista.
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