Hay personas que se sienten atrapadas en el cuerpo equivocado, pero… ¿qué sucede cuando esa persona es una niña?
Éste ha sido el caso de Ryland. Sus padres Jeff and Hillary Whittington vieron la llegada de lo que pensaban era una niña, pero al año del nacimiento se dieron cuenta de que algo no estaba bien. En el 2008, los doctores establecieron que la bebé era sorda, por lo que fue operada para que le colocaran un implante con el fin de poder escuchar.
¿Sus primeras palabras? “Soy un niño”, relatan los padres en un vídeo que publicaron en la web con la meta de documentar la transformación de su hijo transgénero.
En el material audiovisual, la familia Whittington muestra cómo su hija comenzó a sentir aversión hacia “cualquier cosa femenina”. Aunque al principio pensaron que su bebé era “tomboy”, Jeff y Hillary narran que concluyeron que no se trataba de “una fase”.
“Ella dijio: ‘Cuando la familia muera, yo me cortaré el cabello para ser un niño’. Entre lágrimas preguntó: ‘¿Por qué Dios me creó de esta manera?’ ”, relatan a través del vídeo.
Aunque perdieron amistades en el camino, conscientes de la alta tasa de suicidio entre las personas transgéneros, los padres decidieron respaldar a su hija en su transformación. Dejaron de referirse a Ryland como “ella” y optaron por usar “él”. Concluyeron que la identidad de género de Ryland no fue causada por su estructura familiar.
Tras haber compartido la historia, el vídeo ha sido visto más de 2 millones de veces. Asimismo, la familia Whittington fue honrada durante el pasado 22 de mayo en la sexta edición del Harvey Milk Diversity Breakfast. El ahora niño transgénero leyó un mensaje durante la actividad celebrada en San Diego, donde reside con sus seres queridos.
0 comentarios:
Publicar un comentario