Los manifestantes se concentraron frente al edificio gubernamental para reclamar al presidente norteamericano, Barack Obama, hacer uso de su poder ejecutivo y detener las deportaciones.
La manifestación fue parte de la jornada de protestas llevada a cabo en varias ciudades del país al cumplirse un año sin avances desde que el Senado aprobó un proyecto de reforma migratoria, que en caso de ser aprobada por la Cámara de Representantes abrirá la puerta de la regularización para millones de inmigrantes indocumentados.
Según dijeron fuentes policiales a los medios de comunicación, los manifestantes portaron pancartas pidiendo sobre todo el fin de las deportaciones y la separación forzosa de familias.
Los manifestantes además reclamaron a Obama cumplir con sus promesas electorales acerca de los inmigrantes.
Paralelamente, un pequeño grupo formado por media docena de personas organizó una contraprotesta para exigir una aplicación estricta de las normas de inmigración y pedir que no se facilite la regularización de inmigrantes indocumentados, sin que se registrasen incidentes.
Hace casi una década, el primer borrador del proyecto de ley de reforma migratoria integral fue presentado ante la opinión pública del país, sin embargo, a pesar de las protestas, deportaciones y muertes de cientos de miles de inmigrantes, las autoridades parecen hacer oídos sordos a una problemática urgente que centra el análisis del récord de derechos humanos de EEUU.
Durante los últimos cinco años, se han registrado en el país norteamericano, dos millones de expulsiones, y Obama se ha ganado el merecido título de “deportador en jefe”.
Entre tanto, los hispanos que votaron por Obama no dejan de criticarle porque, a su juicio, durante su primer mandato, no hizo nada para reducir las deportaciones de los inmigrantes sin papeles.
LibreRed / Hispan TV
0 comentarios:
Publicar un comentario