Stephen Cohen
Según Cohen, Occidente es el principal culpable de la crisis en Ucrania.
Se une así a otros expertos estadounidenses sobre Rusia, como el ex-embajador de Estados Unidos en la Unión Soviética, Jack Matlock, que opinan de forma similar.
Jack Matlock
Pero lo más sorprendente de las opiniones de Cohen, es que según él, si Ucrania se une finalmente a la OTAN, eso podría conducir a una guerra nuclear.
Curiosamente, la pasada semana, el ex presidente polaco y Premio Nobel de la Paz, Lech Walesa, afirmó algo parecido, cuando dijo que si los Estados Unidos y la OTAN enviaban armas a Ucrania, eso podría llevar a una guerra nuclear, considerando que Polonia debería disponer de cabezas nucleares para disuadir a Rusia de realizar un ataque (curiosa forma de tratar de evitar un conflicto nuclear)
A ellos deberíamos añadir las opiniones del controvertido político norteamericano Lyndon LaRouche, que desde hace varios años, viene afirmando, de forma muy insistente, que Barack Obama pretende realizar un ataque nuclear contra Rusia:
“El mundo se encuentra actualmente al borde de un bombardeo termonuclear ya previamente preparado, encabezado por los angloamericano, desatado por la alianza angloamericana, en contra de naciones destacadas de Asia como Rusia y China.
Lyndon LaRouche
Este peligro existe ahora al menos en tanto que el Presidente estadounidense Barack Obama, controlado por Londres, siga como Presidente de Estados Unidos de América. Esta condición se ha preparado previamente desde el asesinato del ex jefe de Estado libio mediante el concierto de Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos bajo el Presidente Obama”
Por si todo esto fuera poco, la semana pasada, un general Ruso llamado Yury Yakubov, reclamó que Rusia modernizara su doctrina militar, recuperando de nuevo la doctrina del
Ataque Nuclear preventivo contra la OTAN.
De momento, todo esto no son más que declaraciones altisonantes, de expertos, políticos y militares.
Pero hacía muchos años que la posibilidad de una guerra nuclear había sido erradicada del imaginario público.
Sin embargo, la situación actual de confrontación entre potencias por asegurarse la hegemonía económica y política mundial, ha devuelto el tema a la primera plana.
Cada vez es más evidente que estamos inmersos en una nueva guerra fría y esto solo es el comienzo: hay indicios cada vez más claros de que tarde o temprano, puede convertirse en una guerra muy real.
0 comentarios:
Publicar un comentario