En Turquía, el partido gobernante Justicia y Desarrollo (AKP) perdió la mayoría absoluta que ostentaba desde 2002 en unas legislativas en las que un partido de izquierda pro kurdo entró en el Parlamento turco en una victoria considerada histórica.
Los vecinos de la ciudad kurda, Diyarbakir, acudieron el domingo masivamente a las urnas. Dentro de las papeletas depositaban todo tipo de sueños.
La mayoría aquí votó al Partido Democrático de los Pueblos, conocido como HDP, una coalición de izquierdas pro kurda que se propuso superar el 10 % de umbral de voto y entrar en el Parlamento de Turquía.
Los seguidores de la formación sufrieron el viernes pasado un atentado durante un mitin que costó la vida a cuatro vecinos y dejó numerosos amputados.
Ya antes de conocer el resultado de las urnas, en estas calles se daba por hecha la llegada al parlamento del HDP. Todo el mundo celebraba lo que consideraba una victoria, y que conllevaba la pérdida de diputados del Partido Justicia y Desarrollo, que lleva doce años gobernando con mayoría absoluta.
El partido gobernante AKP pierde la mayoría absoluta y deberá negociar, si quiere formar gobierno, con toda la oposición. La oposición le dice que es el principio de su fin.
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