Las malas señales se acumulan, precisamente ahora, cuando parecía que la guerra de Siria podía llegar a su fin, tras la demoledora y decisiva intervención rusa en apoyo del gobierno de Bashar al-Assad y cuando se estaban iniciando conversaciones de paz entre los múltiples contendientes para llegar a un final acordado del conflicto.
Pero en los últimos días, parece que todo se ha complicado.
Las negociaciones de paz sobre Siria en Ginebra se han aplazado hasta el 25 de febrero,enmedio de acusaciones como las realizadas por el viceministro ruso de Exteriores Guennadi Gatilov, que ha tildado de“inadmisibles los esfuerzos de la oposición de bloquear los diálogos de paz intersirios, usando como pretexto la operación militar rusa en Siria”, mientras los opositores acusaban a Asad y Rusia de aprovechar la cumbre para rodear la importante ciudad de Alepo.
Y es que en estos momentos, todo gira alrededor de una batalla crucial que puede decidir el destino de este conflicto: la batalla por Alepo, controlada por una amalgama de milicias, “algunas vinculadas al Ejército Libre de Siria y otras, yihadistas, próximas al brazo de Al Qaeda, el Frente Nusra”.
Desde hace días, se suceden las noticias sobre las victorias del ejército Sirio, apoyado por la aviación rusa, estrechando el cerco sobre la segunda ciudad más grande de Siria.
Estas continuas victorias han provocado una ofensiva informativa en los medios occidentales, que han iniciado un carrusel de graves acusaciones (y manipulaciones descaradas) contra el ejército de Al-Assad y la aviación rusa, acusándolos de bombardear a población inocente y perpetrar matanzas masivas e indiscriminadas en las poblaciones que van conquistando, con titulares y extractos como los siguientes:
“Asad y Rusia aprovechan la cumbre de Ginebra para rodear Alepo”
“Activistas en la zona, donde la presencia de periodistas apenas es posible, aseguran que al menos 45 civiles han muerto en los últimos tres días debido a los ataques de la aviación rusa”
“Se reciben informes sobre una aceleración masiva de la agresión militar rusa y del régimen en Alepo y Homs, incluidos ataques a hospitales e infraestructuras críticas”
“Los objetivos son, como casi siempre, mayormente civiles”
“Esta operación militar ha originado el desplazamiento de decenas de miles de personas a la frontera con Turquía, que no les deja entrar en su territorio, aunque ha iniciado la construcción de dos campos de refugiados temporales dentro de Siria”
No hace falta decir que la OTAN se ha expresado con contundencia (y la habitual hipocresía) al respecto, hasta el punto de afirmar que “los bombardeos rusos socavan los esfuerzos para la paz en Siria”
“El secretario general de la OTAN alega que los bombardeos de Rusia contra las posiciones de terroristas en Siria ‘socavan’ los esfuerzos para resolver la crisis que azota al país árabe”
Y no hace falta decir tampoco, que la propaganda contraria, que podemos encontrar mayoritariamente en medios de rusos como RT o Sputnik, o iraníes como Hispan TV, nos dicen exactamente lo opuesto (a los medios rusos, en el colmo de la desvergüenza, ya solo les falta decir que sus bombas, cuando explotan, “solo matan a los malos” y que “obsequian con deliciosos caramelitos a los niños sirios”)
Es lo que podemos esperar de una guerra de propaganda, en la que nadie, ni un bando ni otro, dicen la verdad y en la que ambos tratan de demonizar al enemigo y presentarse como los “salvadores ante la barbarie del enemigo”.
Un ejemplo de la creciente guerra informativa entre la OTAN y Rusia, lo teníamos en una reciente afirmación del presidente checheno, Ramzan Kadyrov, que afirmaba lo siguiente…
“Presidente checheno: instructores de OTAN entrenan a wahabíes en contra de Rusia
El presidente checheno, Ramzan Kadyrov, denuncia que los “instructores” de la OTAN entrenan a los milicianos wahabíes para que perpetren atentados en Rusia”
Independientemente de quién esté más cerca o no de la verdad, lo cierto es que las recientes ofensivas de Al-Assad con el apoyo de Rusia y de las milicias de Hezbolá, están acelerando los acontecimientos, hasta el punto de que tanto Turquía como Arabia Saudí ya han anunciado su intención de intervenir en el conflicto con tropas terrestres, probablemente para tratar de reforzar las posiciones de los rebeldes sirios y las milicias terroristas que han estado financiando hasta ahora para tratar de derrocar a Assad por intereses geoestratégicos.
Y ya podemos decirlo abiertamente: si Turquía y Arabia Saudí invaden Siria, estaremos ante una gran guerra regional de imprevisibles consecuencias, que incluso podría acabar derivando en una Tercera Guerra Mundial.
Así, en los últimos días hemos sabido que Arabia Saudita ha expresado su disposición a unirse a operaciones terrestres contra Estado Islámico en Siria (una burda excusa para intervenir en el conflicto para tratar de derrocar a Assad)
“Arabia Saudí y sus aliados ejecutarán en breve maniobras militares en la provincia saudí de Al-Sharqiya para preparar una posible intervención terrestre en Siria”
“Miles de las fuerzas saudíes, egipcias, jordanas, sudanesas y de otros países árabes del Golfo Pérsico comenzarán en menos de 48 horas las maniobras militares conocidas como’ El Trueno del Norte’ en la ciudad de Hafar Al-Batin”
“Los ejercicios militares incluyen operaciones terrestres, aéreas y marítimas, con un amplio despliegue de vehículos y personal” de los países aliados, con el fin de ultimar sus preparativos para luchar en Siria sobre el terreno contra Estado Islámico”
Por otro lado, Arabia Saudí reitera su disposición de enviar ‘fuerzas especiales’ a Siria
“El ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí, Adel al-Yubeir, recalca la disposición de su país para enviar tropas terrestres en Siria; una oferta que EE.UU. vuelve a apoyar”
“Al-Yubeir además ha afirmado que el reino árabe sigue brindando apoyo a los grupos armados sirios y ha dejado claro que este apoyo continuará hasta el derrocamiento del presidente sirio, Bashar al-Asad”
“Por su parte, John Kerry ha saludado la propuesta saudí y ha resaltado que Washington respalda cualquier intervención militar en suelo sirio”
Es decir, que EEUU ve perfecto que se monte una guerra regional alrededor de Siria, quizás porque tiene la intención de no intervenir directamente en ella con tropas terrestres y en un entorno de guerra convencional, al menos de momento.
Por otro lado, Arabia Saudí ha mostrado su intención de discutir con la OTAN, su plan de enviar tropas terrestres a Siria.
Y por si a alguien no le quedan claras las graves consecuencias de una intervención militar saudí en Siria, aquí tenemos este esclarecedor estracto publicado en Hispan TV:
“Según han informado este lunes el rotativo saudí Okaz, el ministro saudí de Defensa, Mohamad Bin Salman, asistirá a una reunión de la Alianza Atlántica a celebrarse el miércoles y jueves próximos en la capital belga de Bruselas para discutir la crisis siria”.
“En esa reunión se abordará también el plan saudí de una operación terrestre en Siria para combatir a Daesh”
“Sin embargo, Irán, Rusia y el propio Gobierno sirio advirtieron de las consecuencias de una incursión terrestre en Siria sin el consentimiento de Damasco. El sábado, el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al-Moalem, enfatizó que Damasco resistirá ante cualquier incursión terrestre en su suelo y enviará a los agresores a su casa en ataúdes”
Por si todo esto fuera poco alarmante, otra potencia regional, Turquía, parece estar preparándose para invadir Siria, tal y como llevan denunciando fuentes rusas desde hace semanas; una información que también publicaron medios británicos en su momento…
Sin embargo, la noticia ha sido negada por el gobierno de Erdogan…
A pesar de que a la vez lo está insinuando, como nos muestra esta otra noticia…
“Comentaristas políticos turcos estiman este domingo que Erdogan parece estar listo para tratar “por todos los medios”, de evitar la creación de estado independiente kurdo “de facto” en el norte de Siria, incluyendo los militares”
“Las declaraciones del mandatario turco han tenido lugar después de que el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, el general Igor Konashenkov, declarara el pasado jueves que Rusia tiene pruebas de que Turquía está en la fase preparatoria de una invasión militar del territorio sirio. Sin embargo, una fuente del Gobierno de Ankara ha desmentido tal circunstancia”
Para reforzar las sospechas sobre los preparativos de Turquía para invadir Siria, añadamos que el gobierno de Erdogan se ha negado a autorizar una inspección de observadores rusos en su espacio aéreo, infringiendo con ello el Tratado de Cielos Abiertos que permite este tipo de inspecciones.
A las evidentes intenciones de invadir Siria por parte de Arabia Saudí y Turquía, debemos añadir el apoyo ya explícito de algunos de sus aliados, como Emiratos Árabes Unidos:
“Emiratos Árabes Unidos está listo para enviar tropas a Siria
Las autoridades de Emiratos Árabes Unidos aseguran estar listas para enviar tropas terrestres a Siria, con el objetivo de participar en la lucha contra el Estado Islámico que lleva adelante la coalición internacional liderada por EE.UU., informa Reuters”
Y otros movimientos preparativos que también indican que algo grande podría estar cociéndose:
“Catar y Turquía acuerdan aumentar sus lazos miliatres”
“El presidente turco, Recep Tayip Erdogan, y el ministro catarí de Defensa, Jaled bin Mohamad al-Atiya, mantuvieron el lunes un encuentro a puertas cerradas en la ciudad de Ankara, capital de Turquía, para abordar los retos regionales”
“El encuentro se produjo después de que en diciembre de 2015 Ankara anunció sus planes para construir una base militar en Catar que podría acoger a cerca de 3000 soldados”
Para añadir más elementos desestabilizadores al cóctel, tenemos el enfrentamiento entre Israel y las fuerzas de Hezbolá, aliadas de Assad y de Rusia y que están pasando desapercibidas…
“Israel ataca posiciones de Hezbolá en Siria
La Fuerza Aérea de Israel atacó la pasada madrugada las posiciones de las fuerzas de Hezbolá en la autopista Damasco-Homs en Siria, según informó el portal Al Jazeera citando medios sirios.
Al mismo tiempo Al Jazeera citó la agencia turca Anadolu, que informa de que un grupo de cazas israelíes simularon ataques a campamentos chiíes en Becá y Baalbek, en el este del Líbano”
A ello debemos añadir una aseveración realizada por el Departamento de Estado de EEUU, que en una reunión informativa para los medios de comunicación de Estados Unidos, dijo que había llegado el momento de establecer una zona de seguridad de exclusión aérea en el norte de Siria. EEUU llegó a afirmar que: “Una vez que se establezca esta zona, no creemos que Rusia desafie las fuerzas de Estados Unidos y de la OTAN, sobre todo si estuvieran operando principalmente desde Turquía”
Como respuesta, Rusia afirmó que…
“Sistema de defensa antiaérea en Siria responderá a cualquier amenaza contra la aviación rusa.
Moscú instó a Turquía a respetar el memorándum ruso-estadounidense sobre la seguridad de vuelo en el espacio aéreo sirio.
Los sistemas de defensa antiaérea desplegados por Rusia en Siria responderán a cualquier amenaza proveniente de terceros países para los aviones en misiones de combate contra el terrorismo, anunció el viceministro ruso de Defensa, Anatoli Antonov”
Otro gesto de fuerza por parte de Rusia, es el anuncio de que “la Armada de Rusia podría aumentar su presencia en el Mediterráneo a 20 buques de guerra, en función de las misiones asignadas”
Bien, como podemos ver, todos los indicios, noticias y gestos de unos y otros, no apuntan precisamente a una conclusión negociada del conflicto.
De hecho, son varios los analistas que advierten sobre lo peligrosa que se está volviendo la situación, como indicamos en los siguientes artículos del Microlector:
O como advierte el periodista británico Finian Cunningham en un reciente artículo:
“La invasión saudita de Siria es “un farol que puede iniciar la Tercera Guerra Mundial”
Si Riad y Washington entran en Siria, “será una chispa en el polvorín”, ya que se verá como un acto de guerra contra Siria y sus aliados”
Sin embargo, Cunningham sostiene que el plan saudí de envío de tropas terrestres a Siria parece ser una simple estratagema, aunque advierte que es justamente el tipo de ruido de sables imprudente que puede encender una guerra total en que pueden acabar enredándose EE.UU. y Rusia”
Que quede claro que no estamos diciendo que vaya a estallar una gran guerra regional, ni la Tercera Guerra Mundial.
Todo lo que estamos viendo puede ser simple postureo político y el tipo de gestos altisonantes propios de situaciones de tensión como ésta, que al final no van más allá.
Pero lo que parece claro es que si hace unas semanas parecía que el conflicto de Siria iba camino de una resolución pactada, ahora las cosas parecen ser muy diferentes.
Y para terminar con los indicativos inquietantes, una noticia aparentemente no relacionada con el conflicto que proviene de Alemania, y que los propios medios alemanes han interpretado como una posible mala señal, como indicamos en el artículo
SOSPECHOSO Y PREOCUPANTE: MERKEL QUIERE DESPLEGAR FUERZAS DE LA OTAN EN LA COSTA TURCA“El diario alemán Deutsche Wirtschafts Nachrichten (DWN) ha revelado que la canciller alemana, Angela Merkel, quiere enviar tropas de la OTAN a la costa turca con el presunto objetivo de apoyar a Turquía en la lucha contra el tráfico ilegal en la costa del mar Egeo.
Sin embargo, según el diario, el propósito real de esta nueva iniciativa y del reforzamiento de la presencia de la OTAN en la región, sigue sin estar claro.
El periódico señaló que Merkel ha criticado últimamente la operación de Rusia en el norte de Siria y la ha culpado por la aparición de una nueva ola de refugiados. La canciller alemana, condenó los ataques de la Fuerza Aérea de Rusia y el ejército sirio cerca de la ciudad de Alepo, en palabras inusualmente agudas:
“En los últimos días, no sólo estamos alarmados, sino también consternados por el sufrimiento humano para decenas de miles de personas causadas por los bombardeos, sobre todo de la parte rusa”, declaró Merkel tras reunirse con el primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu”
Así pues, no solo tenemos un enfrentamiento potencial que implica a potencias regionales, sino que los propios países occidentales denuncian las actividades de Rusia cada vez con mayor agresividad.
E incluso utilizan la crisis migratoria en Turquía como pretexto para desplegar tropas de la OTAN en la región…tropas que se añaden a las del ejército sirio de Asad, las milicias opositoras y terroristas de todo pelaje y condición que se enfrentan contra todos y entre sí, las tropas rusas encubiertas y su potente aviación, la coalición internacional liderada por EEUU, Hezbolá, las tropas de la Guardia Revolucionaria Iraní, los Kurdos, Israel y sus aviones penetrando en Siria para realizar ataques, y a todas ellas podremos sumar sobre el terreno las tropas invasoras de Turquía, la coalición internacional liderada por Arabia Saudí, Catar, Emiratos Árabes Unidos…
¿Hacen falta más ingredientes para fabricar una bomba de grandes proporciones?
Si esto acaba “bien”, podremos hablar de un auténtico milagro…
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