Instalan el primer refrigerador público en Praga para resolver el problema de qué hacer con los alimentos sobrantes y caducados. La nevera proporcionará alimentos a aquellos que lo necesiten.
Según las estadísticas, un tercio de los alimentos del mundo se desperdicie y se descartan.
La comida del refrigerador podrá ser tomada por cualquier persona: personas sin hogar, estudiantes que quieran comer después de una fiesta, o aquellos que hayan olvidado comprar alimentos.
“La idea de poner una nevera en la vía pública de Praga se me ocurrió cuando descubrí la cantidad de comida que es tirada a la basura por nuestros residentes. Son decenas de kilos”, sostiene el impulsor del proyecto, Pavel Vodička.
La nevera pública se ha instalado cerca de la cafetería Na půl Cesty, en el barrio de Pankrác de Praga.
“La gente puede dejar productos que no va a utilizar. Por ejemplo, antes de ir de vacaciones o después de las vacaciones. Si alguien quiere ayudar también pueden participar llenando el frigorífico de alimentos”, dijo el organizador.
Los alimentos que se dejen en el frigorífico no deben estar abiertos, sucios o en mal estado. sin embargo, alimentos caducados si pueden dejarse en el refrigerador público.
El impulsor del proyecto especifica que el refrigerador se debe mantener ordenado y limpio. Cualquier persona que use la nevera también debe agregar una notificación en el registro, describiendo como lo dejaron o cómo lo encontraron.
En otros países ya existen iniciativas similares.
En Alemania, el primer refrigerador público se instaló en Munster y poco después en otras ciudades de Alemania y Austria.
Praga no es la única ciudad en la República Checa con refrigeradores públicos. Tales refrigeradores ya se han visto en Pilsen, Ceske Budejovice, y Litomerice.
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