Según testigos recogidos por periodistas de RT, con frecuencia los militantes heridos de Estado Islámico son transportados a través de la frontera con Siria a los hospitales turcos para ser curados. Su travesía segura está supuestamente garantizada por las autoridades turcas.
El periodista de RT Lizzie Phelan afirma haber visitado Gaziantep, una ciudad en el centro-sur de Turquía, a unos 60 kilómetros de la frontera con Siria. Allí, los testigos y los médicos le dijeron que la mayoría de los combatientes de Estado Islámico son tratados en la ciudad fronteriza de Kilis al sur de Gaziantep.
“Muchos militantes heridos de ISIS o del FSA (Ejército Libre Sirio) son llevados llevados a la frontera en camionetas pick-up, no en ambulancias”, sostiene el Presidente de la Asociación Médica de Gaziantep, Hamza Agca.
Los hombres heridos fueron conducidos al parecer, desde una “zona de guerra” y los médicos a menudo tuvieron que lidiar con cosas como “granadas que caen de sus bolsillos”, agregó Agca.
Un médico de Kilis también confirmó a RT que estaban recibiendo a los combatientes desde el otro lado de la frontera, incluidos los de Estado Islámico. El médico dijo bajo condición de anonimato que no era más que uno de los médicos que trataban a los terroristas en Kilis.
El médico agregó que el flujo de militantes que está siendo admitido en hospitales turcos ha disminuido, pero que todavía se admiten militantes cada par de semanas.
Aunque los médicos cumplían con su juramento de ayudar a los heridos con independencia de que fueran o no terroristas, los propios médicos confirmaron que se permitía a los heridos de Estado Islámico que volvieran a la frontera a luchar en el frente, sin ningún impedimento por parte de las autoridades turcas.
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