miércoles, 21 de diciembre de 2016

Grupos neonazis cobran fuerza en México

La imagen puede contener: 12 personas, personas sentadas y exteriorLos grupos neonazis están presenten en entidades como: Nuevo León, Chihuahua, Baja California, Puebla, Guanajuato, Jalisco y Ciudad de México.
El arribo de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos, la nación más poderosa del planeta, nuestro inmediato vecino del norte -apenas divididos por más de 3 mil kilómetros de frontera-, trae consigo el grave riesgo del resurgimiento en México de grupos neonazis y de ultra derecha, como el Ku Klux Klan y grupos paramilitares, alertan expertos, politólogos, sociólogos y representantes de la comunidad judía.
En entrevistas por separado con El Sol de México, investigaciones y reportes públicos, se documenta la presencia latente, soterrada, de este tipo de organizaciones con ideología de la supremacía blanca, xenofobia, misoginia y antisemitismo, desde la época de la posguerra (1945), y su resurgimiento en territorio nacional desde 2013, en puntos geográficos y organizaciones políticas y sociales muy señaladas.
Estas entidades son Nuevo León, Chihuahua, Baja California, Puebla, Guanajuato, Jalisco y Ciudad de México. Entre los partidos y organizaciones políticas y sociales señalados están, de manera reiterada, el Partido Acción Nacional (PAN), el aún sin registro Partido Nacional Socialista de México (PNS), Organización por la Voluntad Nacional y México Despierta.
Para los investigadores y catedráticos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ignacio Isaías López y Roberto Duque, aun cuando la presencia de este tipo de manifestaciones de la extrema derecha en el país han sido marginales, el riesgo de un resurgimiento de este tipo de organizaciones es real y representan “un serio peligro”, dadas las recientes reacciones racistas y discriminatorias, tras el discurso radical, violento, misógino y xenófobo, del Presidente electo de Estados Unidos.
López Pérez, sociólogo y profesor de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, afirma que en México los grupos neonazistas no han sido tantos, pero reconoce que los riesgos radican en que “no faltarán los grupos radicales de trasnochados que van a tratar de retomar o montarse en el discurso populista de derecha que postula el próximo mandatario del Gobierno de Washington, con la pretensión de rescatar el neonazismo”.
El constitucionalista y académico de la Máxima Casa de estudios, Roberto Duque, advierte que aunque en nuestra Constitución está acotada la manifestación de este tipo de expresiones de ultra derecha, con la aparición de Trump, “hay terribles riesgos y serios peligros para México y el mundo, dados los patrones que este personaje reúne en materia de demagogia y agresividad singular”.
“Ya se le subestimó como candidato republicano, se le volvió a subestimar en la campaña presidencial. No podemos darnos el lujo de volver a subestimarlo”, señala el investigador universitario. “El tono de Trump en su campaña exacerbó a toda esta clase de movimientos, y es muy preocupante que el Ku Klux Klan haya mostrado su regocijo, y que la ultraderecha en Francia haya hecho ya lo mismo”, remarcó.
Los nefastos antecedentes del neonazismo
La historia del nuevo nazismo se da en los instantes mismos del ocaso y extirpación del delirio y sueños hegemónicos de Adolf
Hitler. Aún no habían dejado de sonar las armas de la segunda guerra mundial (1945), que cobraron la vida de más de 40 millones de seres humanos, cuando ya se gestaba la creación del primer partido neonazi en la misma tierra que dio aliento a sus fundadores.
No obstante, para los catedráticos mexicanos entrevistados por este diario, los grupos neonazistas han existido en todas las sociedades. El nazismo incluso, es parte de un fenómeno que es anterior al nazismo y al fascismo (movimiento de carácter totalitario y nacionalista), que tiene sus antecedentes en el conservadurismo terrateniente desde épocas feudales.
Es un fenómeno que tiene que ver con estar en contra de lo establecido. Es un conservadurismo de derecha que tiene referentes en el ser populista, pero de derecha, no de izquierda. Y aquí en México ha sido débil, caso contrario al populismo de izquierda que ha sido mucho más relevante, sobre todo con su último exponente, Andrés Manuel López Obrador.
Neonazismo es un término que se acuñó para referirse a los movimientos posteriores a la Segunda Guerra Mundial que continuaban apoyando y difundiendo las ideas del nazismo. Quienes se apoyan en esta ideología niegan el Holocausto y admiran a Hitler. Encuentran sus bases en el ultranacionalismo y el antisemitismo, así como también usan símbolos o logos similares a la Esvástica nazi.
El símbolo y la cruz esvástica, o suástica, proviene del hinduismo, representa las puertas del nacimiento y de la muerte, y el concepto impersonal de Dios. En Alemania existen diversos partidos y movimientos neonazis que continúan divulgando la ideología de la supremacía racial de la raza aria o blanca.
El más conocido de todos es el Partido Nacional-Democrático de Alemania, que entre 2004 y 2014 contó con representantes parlamentarios en el Parlamento Regional Sajón y en el Parlamento Regional de Mecklemburgo-Pomerania Occidental.
Los partidos y grupos neonazis siguen manteniendo su política de rechazo a los extranjeros -principalmente a aquellos que no son de raza blanca- y demandando su expulsión de tierras alemanas. De acuerdo al balance del Ministerio del Interior alemán, en 2006 los neonazis cometieron 12 mil 238 delitos, entre ellos 726 atentados violentos y 8 mil 738 acciones propagandísticas.
El principal promotor del neonazismo a nivel internacional fue el ex oficial de las Servicio Secreto alemán y ex dirigente de las Juventudes Hitlerianas, Karl Heinz Priester. Tras su muerte y confiscación de sus archivos, por parte de las autoridades de su país, se comprobó que distintas organizaciones venían trabajando hacía tiempo en la organización de una “internacional parada racista y antisemita”.
Ultra derecha y filonazismo en México
En México, la difusión de la ideología nazi y el adoctrinamiento a través de grupos o partidos políticos nunca ha estado tipificada como un delito penal, aunque definitivamente sí está establecida en la Constitución, precisa el investigador de la UNAM, Roberto Duque.
Sostiene que aunque no en forma explícita como en algunas otras naciones que vivieron el problema del Holocausto, como son las constituciones de la posguerra, particularmente Alemania e Italia, que tenían que poner todas las precauciones y vacunas posibles, para que no volviera a ocurrir una situación igual, nuestra Carta Magna sí prevé el tema.
El profesor Duque Roquero refiere que “la Constitución mexicana sí establece claramente que está prohibida toda clase de discriminación, entre otras cosas, por cuestiones raciales y religiosas”. Incluso agrega que la Ley electoral advierte que el emblema y la denominación de los partidos políticos en México no pueden tener ninguna alusión religiosa.
Sin embargo, el maestro sociólogo, Ignacio Isaías López, apunta que la ultraderecha y el filonazismo (simpatía por el nazismo) han estado presentes en varias etapas de la política mexicana. Recuerda que el propio José Vasconcelos, aunque en el ocaso de su vida, llegó a tener simpatía con la ultra derecha, y que cuando Plutarco Elías Calles iba a ser expulsado por el presidente Lázaro Cárdenas, se le llegó a ver bajo su mano con el libro “Mi Lucha”, de Adolf Hitler.
Allá por marzo de 2013, en Monterrey, Nuevo León, se documentó que en los orígenes del Partido Acción Nacional existió la semilla del nazismo, con la ideología presente en algunos de sus integrantes y un intento de resurgimiento, a pesar del repudio internacional.
Se dice que en México, estos grupos se concentran en algunos segmentos de la vida política y empresarial, y que en este contexto, el estado de Nuevo León podría considerarse como “cuna” de movimientos ultraderechistas y fascistas. Se menciona la participación de empresarios y políticos ligados al PAN en este tipo de organizaciones, algunas veces armados.
La directora de Tribuna Israelita, Reneé Dayán, reconoció las fallas en la información contenida en la página web del organismo judío, y accedió amablemente a enviar material documental para el reportaje.
Para poder emitir un posicionamiento formal sobre el tema, pidió al reportero enviar un cuestionario, con la finalidad de consultar las respuestas; sin embargo, hasta la entrega de este trabajo, la directora del órgano informativo nunca devolvió las preguntas con la información solicitada.
No obstante, en el portal de Enlace Judío se reproducen investigaciones periodísticas, en las que se advierte desde 2013 sobre el resurgimiento en México de “grupos fascistas y nazis, algunos financiados por militantes panistas y otros por el Ku Klux Klan”.
Ahí, se afirma de manera abierta que “a pesar del repudio internacional, el nazismo sigue generando adeptos en distintos países”, y que estos grupos del filonazismo se encuentran en la vida política y empresarial en diferentes Estados de la República.

1 comentarios:

  1. La ignorancia a su maxima expresion y la mejor muestra del fracaso del sistema educativo nacional

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