viernes, 24 de febrero de 2012

Puertorriqueños se unen a dominicanos en rechazo a base de EE.UU.




El abogado sindical y dirigente del Movimiento Independentista Hostosiano (MINH), Alejandro Torres, envió hoy a las organizaciones dominicanas una declaración de apoyo al rechazo a la base de Estados Unidos en la isla Saona.

  Torres resaltó que en la propuesta anunciada la pasada semana por el jefe de la Marina de Guerra de la República Dominicana, contralmirante Nicolás Cabrera, justifica el plan alegando que no violenta la soberanía del país ya que la misma (la base) estaría siendo operada por personal dominicano y no por militares estadounidenses.

Se trata en parte, afirmó Torres, de los mismos argumentos que en el pasado han sido esgrimidos en otros países donde el Comando Sur de Estados Unidos opera abiertamente, como es el caso de las bases militares que utiliza Washington en Colombia.

Es ingenuo pensar, advirtió el abogado, que con la importancia que tiene el Canal de la Mona desde el punto de vista de navegación marítima y accesos al Mar Caribe y a la zona del Canal de Panamá, una base naval ubicada en la porción este de territorio dominicano sería utilizada única y exclusivamente para atender un problema de drogas y tráfico de personas.

De hecho, para eso Estados Unidos tiene ubicado del otro lado del Canal de la Mona, en las anteriores instalaciones de la Base Ramey en Aguadilla en Punta Borinquen, unidades de la Patrulla de Frontera, la Guardia Costanera, el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la agencia antidrogas (DEA) que pueden llevar a cabo tales tareas de vigilancia, alertó el letrado y activista político puertorriqueño.

Su propósito es otro, es crear una cabeza de playa en pleno territorio nacional dominicano desde donde puedan ampliar su política imperial sobre la República Dominicana y Haití, aseguró Torres.

La Marina de Guerra de Dominicana, nacida en 1844 con la independencia del hermano país, cuenta en estos momentos con aproximadamente 34 buques, en su mayoría patrulleros, guardacostas y pequeñas embarcaciones, algunas de las cuales fueron transferidas por Estados Unidos al gobierno dominicano.

Los opositores a la construcción del muelle propuesto y junto a una base naval, indican que el lugar donde se proponen desarrollar la construcción constituye uno de los ambientes más frágiles y diversos en el Estrecho de Catuano.

Se trata de un área recia en anidamientos y reproducción de tortugas marinas, yacimientos arqueológicos subacuáticos, vivero de especies del mar, donde además se reciben anualmente cientos de miles de visitantes extranjeros a su Parque Nacional y lugares turísticos.

Los puertorriqueños(as), que hemos sufrido la presencia de la Marina de Guerra de Estados Unidos durante décadas, y en la resistencia y lucha contra el uso de la Isla de Vieques se articuló una heroica lucha que condujo al cierre de polígonos de tiro y área de maniobras anfibias, recordó Torres.

Eventualmente, se logró el cierre de la Estación Naval Roosevelt Roads en Ceiba. Tenemos que ser solidarios con el pueblo dominicano en estos momentos.

Más aún, afirmó Torres, estar atentos a cualquier pretensión, venga de donde venga, que suponga un incremento de la presencia militar de Estados Unidos en Puerto Rico, o la utilización de las islas localizadas en la porción oeste de Puerto Rico como Mona, Monito o Desecheo como alternativas a la base naval propuesta para Dominicana.

Confiamos, concluye en su declaración, en las capacidades de lucha del pueblo dominicano, el cual, como dice su Himno Nacional, "Que si fuere mil veces esclava, otras tantas ser libre sabrá." En ese esfuerzo contarán siempre con el apoyo solidario de los puertorriqueños.

oda/ef

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