Según la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura (Adhex), la medida aprobada por el Gobierno "es desproporcionada, xenófoba y racista".
La actual ley de extranjería otorga a los extranjeros que estuvieran inscritos en el padrón municipal el derecho a la asistencia sanitaria en las mismas condiciones que los españoles. Esto permitía a las personas inmigradas ilegalmente acceder a las prestaciones de la sanidad pública española. Sin embargo, a partir del 1 de septiembre ya no bastará con estar empadronado para acceder a una tarjeta sanitaria. La reforma sanitaria anunciada por el Gobierno de España contempla la retirada de la cobertura sanitaria gratuita a los inmigrantes irregulares, salvo en los casos de urgencia o embarazo
Más de medio millón de inmigrantes perderán la cobertura sanitaria integral de la que ahora gozan en España porque se encuentran en situación irregular y afectará a varios miles de inmigrantes residentes en Extremadura.
Para Beatriz Cercas, asesora jurídica de la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura (Adhex), la medida aprobada por el Gobierno "es desproporcionada, xenófoba y racista". Considera que si el objetivo era combatir el turismo sanitario habría que mirar más bien hacia algunos "turistas jubilados europeos" en lugar de excluir a estos inmigrantes que son "gente sana, trabajadora y con pocos recursos".
Por su parte, la organización de consumidores Facua ha asegurado que la retirada de las prestaciones sanitarias a los inmigrantes sin legalizar que no encuentran empleo “es una inmoral perversión que puede condenar a la muerte por desatención a multitud de ciudadanos”
Ante esta terrible situación la Comunidad Autónoma de Extremadura ha de negarse a aplicar tan injusta ley y seguir prestando el derecho a la asistencia sanitaria a todas las personas, tal y como ha anunciado recientemente el País Vasco. Asimismo, los Colegios de Médicos de Extremadura han de ratificar que no negarán la asistencia a nadie "sea legal o ilegal" como ya han afirmado colegios de médicos en otros territorios.
En relación con todo lo anterior habría que recordar que los inmigrantes usan mucho menos el sistema sanitario que los autóctonos cosa ya sabida en el resto de países desarrollados pero también demostrado en España con múltiples estudios científicos. Lo primero que hay que tener en cuenta es que la mayoría de inmigrantes “irregulares” son jóvenes y sanos (especialmente los de los países pobres) pero incluso cuando se ajusta por edad y sexo las diferencias son muy grandes. Globalmente los inmigrantes están usando y gastando en la Sanidad Pública española mucho menos que los españoles.
Las consecuencias van a a ser muy negativas a muchos niveles:
¡EL DÉFICIF NO LO PROVOCAN LOS INMIGRANTES ILEGALES!
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