Los Mossos d'Esquadra de paisano portaban un brazalete amarillo y una vestimenta como para salir corriendo. Turistas atónitos ante semejante imagen. Una manifestación reivindicativa, tranquila y cargada de festividad. Era tanta la expectación por los incidentes, que había tantos medios de comunicación como en una rueda de prensa de calado internacional, es evidente que los dirigentes del BCE están a escasas horas de que lleguen a la ciduad condal.
Todo comenzó a la llegada de plaza Universitat. Si el aspecto era de punkie, perroflauta o familia con niños pero con cara reivindicativa, te convertías en diana para un intenso cacheo. La prensa antes de entrar, cada uno con su brazalete o chaleco con la numeración, al mas estilo de cárcel de los Estados Unidos. Somos periodistas numerados en las calles de barcelona.
Todo aquel con algún fenotipo raro o llamémosle vestimenta peculiar o simplemente con cara de cabreado por los recortes que sufrimos y con intención de acceder a la plaza Universitat, han sido registrado tanto las pertenencias de jóvenes y de familias.
Un total de unas 300 persona identificadas a la entrada de la manifestación. Se han detenido a cuatro personas durante la protesta, que se ha desarrollado sin incidentes. Uno de ellos por un delito contra la salud pública y otros tres por mínimos desórdenes públicos. 6.000 (cifra de la policía autonómica) y 22.000 personas (según la organización)
Una policía 'tuneada'
Manifestantes, turistas y medios de comunicación desplazados desde otras ciudadades no daban crédito al observar el como se tunean los agentes de la policía autonómica: capuchas y gorras,y un brazalete amarillo que les identificaba como policias.
Las novedades del dispositivo policial ha sido la vestimenta de los Mossos d'Esquadra de paisano.
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