Como en los buenos tiempos de Balaguer
El accionar de la Policía anoche en la UASD fue abusivo, represivo y antisocial
Indignación y repudio. Solo así se puede describir el sentir por lo ocurrido anoche en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde cientos de policías incursionaron al campus universitario con armas en manos; arrastraron y apresaron estudiantes.
Es cierto que no se puede estar de acuerdo con la violencia cuando se lleva a cabo una lucha justa como la que llevan los estudiantes, pero no es menos cierto que el accionar de la Policía fue abusivo, represivo y antisocial.
Pues entrar al campus de la universidad primada de América, para amedrentar y apresar estudiantes con armas en manos como si se tratara de delincuentes es un acto reprochable por parte de la Policía que con este hecho no hace otra cosa más que echarle leña al fuego.
Esa acción de la Policía, característica en ella, debe ser reprochada por toda la sociedad consciente de que no debía violarse el fuero universitario y de que un centro de estudios no puede militarizarse como si fuese un campo de guerra.
En este gobierno como cuando Balaguer en sus mejores tiempos se permite este tipo de acciones. El presidente Leonel Fernández, quien estudió y fue profesor en la UASD, debe pedir una explicación de lo acontecido, a menos que antes ya haya estado muy bien informado.
Los estudiantes deben explicar también el porqué quemaron una jeepeta y se enfrentaron a pedradas contra la miembros de seguridad de la UASD.
Asimismo, es reprochable que cientos de Policías, de unidades especiales, encapuchados y armados hasta los dientes entren a la UASD, lancen al piso los colchones que eran usados en las vigilias, y peor aún, que rompan los cristales de la FED para luego lanzar bombas lacrimógenas a los estudiantes y sacarlos arrastrados como perros.
Fue penoso ver estudiantes ahogándose por el humo de las bombas lacrimógenas, uno de ellos incluso inconsciente, estudiantes (incluyendo mujeres, ahora que se habla del tema de los feminicidios) tirados en el piso y con las manos en la cabeza como si se tratara de prisioneros de guerra.
El rector debe pedir una disculpa pública a los estudiantes y al país, por lo ocurrido anoche y también por la desastrosa gestión que ha encabezado.
El señor Mateo Aquino Febrillet debe revisarse si es cierto que fue él quien solicitó la intervención policial a la UASD y junto a esto revisar también el aumento dispuesto a màs de 50 servicios universitarios, incluyendo el de los créditos.
Creo que la lucha debe seguir, pero claro de forma pacífica, para que la voz de los miles de estudiantes que piden una revisión de la tarifa y mayor presupuesto para la UASD sea escuchada y así se imponga la sensatez.
Twitter: @melbingomezp
Es cierto que no se puede estar de acuerdo con la violencia cuando se lleva a cabo una lucha justa como la que llevan los estudiantes, pero no es menos cierto que el accionar de la Policía fue abusivo, represivo y antisocial.
Pues entrar al campus de la universidad primada de América, para amedrentar y apresar estudiantes con armas en manos como si se tratara de delincuentes es un acto reprochable por parte de la Policía que con este hecho no hace otra cosa más que echarle leña al fuego.
Esa acción de la Policía, característica en ella, debe ser reprochada por toda la sociedad consciente de que no debía violarse el fuero universitario y de que un centro de estudios no puede militarizarse como si fuese un campo de guerra.
En este gobierno como cuando Balaguer en sus mejores tiempos se permite este tipo de acciones. El presidente Leonel Fernández, quien estudió y fue profesor en la UASD, debe pedir una explicación de lo acontecido, a menos que antes ya haya estado muy bien informado.
Los estudiantes deben explicar también el porqué quemaron una jeepeta y se enfrentaron a pedradas contra la miembros de seguridad de la UASD.
Asimismo, es reprochable que cientos de Policías, de unidades especiales, encapuchados y armados hasta los dientes entren a la UASD, lancen al piso los colchones que eran usados en las vigilias, y peor aún, que rompan los cristales de la FED para luego lanzar bombas lacrimógenas a los estudiantes y sacarlos arrastrados como perros.
Fue penoso ver estudiantes ahogándose por el humo de las bombas lacrimógenas, uno de ellos incluso inconsciente, estudiantes (incluyendo mujeres, ahora que se habla del tema de los feminicidios) tirados en el piso y con las manos en la cabeza como si se tratara de prisioneros de guerra.
El rector debe pedir una disculpa pública a los estudiantes y al país, por lo ocurrido anoche y también por la desastrosa gestión que ha encabezado.
El señor Mateo Aquino Febrillet debe revisarse si es cierto que fue él quien solicitó la intervención policial a la UASD y junto a esto revisar también el aumento dispuesto a màs de 50 servicios universitarios, incluyendo el de los créditos.
Creo que la lucha debe seguir, pero claro de forma pacífica, para que la voz de los miles de estudiantes que piden una revisión de la tarifa y mayor presupuesto para la UASD sea escuchada y así se imponga la sensatez.
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