La escogencia por parte del canal History Channel, al ex presidente Álvaro Uribe Vélez como el colombiano más representativo en la historia de nuestro país. Resulta ser, una reivindicación intrascendental e insensata de la realidad histórica de Colombia.
La escogencia por parte del canal History Channel, al ex presidente Álvaro Uribe Vélez como el colombiano más representativo en la historia de nuestro país. Resulta ser, una reivindicación intrascendental e insensata de la realidad histórica de Colombia. Confundiéndose a nivel internacional, el panorama social del país; bajo la premisa de una figura que sintetiza pasiones de mezquindad guerrerista.
Así, la mal lograda designación del Canal History Channel constituye una completa indignación, afrenta y propende hacia una equivoca memoria sobre ilustres personajes que orgullosamente han hecho ecos de moralidad, urbanidad y culturización sobre las distintas facetas de nuestra nación.
Sin embargo, si vamos más allá del tapiz de la ciber-votacion y miramos algunos fondos, la designación no es gratuita. Por el contrario, emerge una mutua correspondencia entre las políticas de producción y programación del canal; y el quehacer político del ex presidente.
Desde que fue estrenado el canal History Channel en 1995, su programación tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica, se ha caracterizado por simpatizar en la difusión de las historias militares. Situación que desde el último lustro se ha convertido en la piedra angular de la programación del canal para; más que documentar al televidente, aumentar los índices de raiting sobre uno de los aspectos que infortunadamente más motiva la curiosidad humana, la guerra.
No en vano, a mediados del 2011 el canal difundió una basta documentación de la Segunda Guerra Mundial. Siendo intensificada aquella trasmisión dentro de la habitualidad de sus emisiones diurnas y nocturnas.
Motivo por el cual, el canal fue apodado “The Hitler Channel”. Y no era para menos, en su emisión del documental sobre la Segunda Guerra Mundial, hacia marcada alusiones de salvedad y exaltación a las posturas del dictador Alemán. Como, por ejemplo: “ pero Hitler iba más allá de eso”, “pero Hitler siempre quiso conseguir el apoyo de…”, “pero Hitler era más audaz de lo que se creía en su fisonomía”, en fin. Siempre había una preponderancia al liderazgo que comandó Hitler.
Así pues, sin alejarnos de la realidad, el canal “The Hitler Channel”, perdón, “The History Channel”,promueve tácitamente (como suele suceder en los discursos guerreristas) con su eslogan de la letra ”H”, la valoración guerrerista de entender la misma ”H” como la enmarcación de la letra inicial del más grande genocida de la raza humana y precursor de la guerra más abominable, Adolfo Hitler.
De este modo, la designación de que Álvaro Uribe Vélez es el “Gran Colombiano” para “The History Channel”, no es para menos; pues la guerra siempre ha estado de moda para este canal. De ahí que, su escogencia producto de una supuesta votación así lo legitime. Y es de esperar que sea el “Gran Colombiano”, porque se está legitimado al hombre que en lista de la DEA aparece entre los 100 más buscados del mundo. Al hombre que creó, promocionó y propagó la fuerza Para- militar más grande del continente latinoamericano.
Al hombre que más investigaciones judiciales como presidente de la historia de Colombia ha despertado. Al hombre que propinó el delito de Cohecho, sobornó, corrompió a representantes políticos para permanecer por más tiempo insertado en el poder. Al hombre que le entregó parte del aparato empresarial del estado Colombiano a familiares y amigos. Al hombre que en suma, gestionó y posibilitó como emblema de persuasión al pueblo, el estandarte de que no había ninguna política que se erigiera justa, sin guerra a propagar.
Sobre estos argumentos, se hace irreprochable la elección por parte del canal.
El cual, otorgó al hombre que en definitiva, con sus argucias y maquinaria de pulpo, pudo haber movilizado la mañosa derecha Caprilista Venezolana a su favor; pues la plataforma de emisión del canal The History Channel para Latinoamérica opera desde Caracas, Venezuela…
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