Durante la movilización, los manifestantes expresaron su condena a las “políticas pro israelíes” del Gobierno de Washington, además de rechazar cualquier proceso de paz con Israel que tenga como “mediador” a los Estados Unidos.
En ese sentido, los manifestantes instaron al presidente del Estado palestino, Mahmud Abbás, a “retirarse de las conversaciones de paz” con el régimen de Tel Aviv, reactivadas el pasado 29 de julio, por desarrollarse bajo la lupa estadounidense.
Asimismo, los ciudadanos respaldaron el fuerte rechazo mostrado por grupos como el Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) y el Movimiento de la Yihad Islámica palestina, que se oponen a las condiciones que exige Israel para “conversar”.
Por otro lado, el pueblo palestino también repudia los planes de Tel Aviv de construir miles de nuevas viviendas ilegales para los colonos en la ocupada Cisjordania y Al-Quds (Jerusalén Este).
La manifestación se dio paralelamente a las reuniones que Kerry sostuvo con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente de ese país, Shimon Peres, en las que se abordó el proceso de reconciliación palestino-israelí.
Durante ese encuentro, Netanyahu acusó a las autoridades palestinas de crear “crisis artificiales” y “huir” de lo que él ha llamado una “decisión histórica para la paz”.
El señalamiento se da luego que la Autoridad Nacional palestina advirtiera, una vez más, que no habrá conversaciones directas con el régimen de Tel Aviv, si los israelíes siguen sus planes expansionistas dentro de los territorios ocupados.
Precisamente, días atrás, la radio del ejército israelí anunció que tel Aviv pretende levantar 1.500 unidades para sus colonos en el asentamiento ilegal de Ramat Shlomo, situado en Al-Quds, un anunció que provocó duras críticas internacionales contra el régimen sionista.
Press TV
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