En Brasil, miles de personas protestaron en las calles contra la realización de la Copa Mundial de Fútbol. En Sao Paulo, alrededor de tres mil ciudadanos se vieron sorprendidos por la actuación de la Policía que puso en marcha una nueva operación para detener la protesta y detener a casi todos los miembros del llamado Black Block.
Con masivas manifestaciones en nueve de las más importantes ciudades del país, los brasileños retomaron las protestas contra la realización de la Copa Mundial de Fútbol que iniciará el 12 de junio próximo.
En San Pablo, más de dos mil personas salieron a las calles para participar del acto denominado “No va haber Copa”. Esta es la segunda protesta masiva del año y prometieron otras manifestaciones multitudinarias a medida que se aproxime la inauguración del Campeonato Mundial.
Hoy, la Policía ha puesto en práctica una nueva estrategia para intimidar a los manifestantes: en el horario marcado para iniciar las protestas, varios líderes y decenas de personas fueron citados a comparecer ante una comisaría para someterse a interrogatorios tras ser acusados de prácticas criminales.
Los manifestantes que están en contra de los gastos del Gobierno para construir los estadios e infraestructura para los juegos, que ha superado los 15 mil millones de dólares, fueron sorprendidos por la fuerza policial que puso una segunda estrategia nunca antes utilizada: detuvo a alrededor de 200 jóvenes y advirtió que continuará dificultando la vida de aquellos que quieran protestar con violencia.
Hispan Tv
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